El ministro de Salud de Brasil, Nelson Teich, con poco menos de un mes en el cargo, renunció este viernes después de unas serias fricciones con el presidente de país, Jair Bolsonaro, por sus diferencias en torno al combate del coronavirus.

La renuncia de Teich fue anunciada por el propio Ministerio de Salud, en una breve nota oficial que solamente informó sobre la dimisión y anunció una rueda de prensa para la tarde este viernes.

Teich, oncólogo sin experiencia en la administración pública, fue designado por Bolsonaro como ministro de Salud después de la destitución de Luiz Henrique Mandetta, quien también renunció por tener diferencias con el mandatario brasileño, en cuanto a la implementación de las cuarentenas, que el gobernante censura, para impedir la expansión de la pandemia, que hasta hoy ha dejado en Brasil casi 14.000 muertos.

El ahora exministro asumió el cargo el pasado 16 de abril, una vez que las tensiones entre Bolsonaro y Mandetta se hicieron más que visibles, sobre todo por las duras críticas del gobernante a las medidas de reclusión para contener el contagio del COVID-19.

En ese momento, Brasil tenía cerca de 2.000 muertos y en torno a 30.000 casos de coronavirus, unas cifras que hoy se han disparado y que se teme que seguirán creciendo, pues el peak de la pandemia se espera para el mes próximo.

Según fuentes políticas, las mayores diferencias entre Teich y Bolsonaro fueron en relación a las cuarentenas, pero también por el uso de la cloroquina para tratar a los pacientes de coronavirus.

Bolsonaro insiste en que, aún cuando no se ha comprobado que ese antipalúdico sea efectivo contra el Covid-19, debería ser aplicada incluso en los pacientes con síntomas leves
, mientras que Teich sólo la autorizó, como hizo Mandetta en su momento, para aquellos que llegan a un estado crítico o terminal.

Durante su breve estancia en el Gobierno, Teich también presenció las constantes violaciones de Bolsonaro a las normas de restricción de personas, las cuales no llegó a criticar en público, pero que de acuerdo a fuentes políticas fueron agravando su malestar.