El ingeniero comentó además que lo llamaron para testificar en el juicio del periodista, donde acusa sufrir injurias y calumnias.

El ingeniero Rafael Garay se refirió a su relación con el periodista Iván Núñez, asegurando que tras salir de la cárcel, trató de contactarse con el comunicador para pedirle disculpas y que también será testigo en el juicio de la querella de Núñez por injurias y calumnias.

Garay, que salió en libertad durante 2020, estuvo hablando con los periodistas Julio César Rodríguez y Monserrat Álvarez en el matinal Contigo en la Mañana, donde hablaba de una querella que hizo en contra de su expareja.

Una de las víctimas de tu estafa es la exesposa de Iván Núñez, Marlene de la Fuente. Y en el reportaje aseguran que tu expareja se llama Romina de la Fuente”, destacó Rodríguez poco después de ver el reportaje, buscando aclarar el parentesco entre ambas mujeres.

“No, son alcances de apellido”, aclaró entonces Garay.

“Pero sí vas a declarar como testigo en este juicio de Iván Núñez con una periodista”, replicó entonces Álvarez, en mención a la querella de Nuñez por injurias y calumnias contra Cecilia Gutiérrez y Sergio Rojas.

“La vinculación con Iván Núñez se acabó el año 2016. Yo, cuando salgo de la cárcel, logro recuperar una antigua cuenta de correo, yo le escribí”, mencionó entonces el entrevistado.

En esa rama, expuso que “le ofrecí disculpas, le pedí perdón, y esbocé cómo pensaba compensarlo económicamente por el daño hecho. Jamás tuve respuesta, por lo tanto, yo no tengo ninguna vinculación con Iván Núñez”.

Respecto a su rol como testigo en el juicio, el ingeniero aseveró que “se dice que yo voy a declarar en contra Iván Núñez en un juicio de injurias y calumnias con estos periodistas que yo no conozco; y que soy testigo de la defensa de los querellados, pero cuando uno va a un juicio uno no es testigo de uno o de otro, uno declara la verdad”.

“Yo no tengo nada que desacreditar de Iván Núñez, (sobre) la supuesta doble vida o cosas que hizo, la verdad es que a mí no me constan, además que su relación con una mujer brasilera y la pugna familiar se dio cuando yo estaba en prisión, incomunicado”, añadió.

En esa misma rama, admitió que no estaba seguro sobre qué podría decir al respecto, “pero tengo que ir porque estoy obligado por ley”. De todas formas, puntualizó que “no voy a defender ni atacar a nadie. No sé de qué se me va a consultar (…) yo responderé lo que sé y conozco”.