El estudio que realizará al respecto la FNE abarcará todas las etapas del mercado, tales como el avisaje, el canal de reserva y los establecimientos de hospedajes.

La Fiscalía Nacional Económica (FNE) comunicó que realizará su octavo Estudio de Mercado, el que en esta oportunidad será sobre el mercado del hospedaje, compuesto principalmente por los alojamientos con fines turísticos, los que también reciben a viajeros de negocios, y por los canales y plataformas digitales que participan en este contexto.

La importancia del mercado elegido para el estudio radica en su estrecha relación con el turismo nacional, actividad que en 2019 generó el 3,3% del PIB total de Chile, lo que equivale a casi $6.500 miles de millones, poco menos de US$9.200 millones al tipo de cambio promedio del 2019.

“De este monto, casi $600 mil millones (US$855 millones al tipo de cambio promedio de 2019) provinieron de alojamientos los que, junto a los servicios de comidas, generaron sobre 60% de los empleos de la industria turística, aportando 613 mil puestos de trabajo”, señaló la FNE.

“Esta actividad, que se vio severamente afectada por la pandemia, se ha venido recuperando a buen ritmo en los últimos dos años, lo que hace aconsejable velar por su dinamismo”, añadió, advirtiendo también que es probable que la pandemia haya incrementado el uso de canales digitales para realizar reservas, lo que realza la necesidad de garantizar la competencia entre plataformas.

Mercado del hospedaje en Chile

En un sondeo preliminar, la Fiscalía concluyó que hay al menos tres razones principales que justifican la realización de este estudio. La primera es “la necesidad de analizar si el actual marco regulatorio aplicable tanto a los hospedajes como a las plataformas es adecuado para mantener las condiciones competitivas en esta industria, generando las menores barreras a la entrada posible”.

Lo anterior es relevante, dijo, si se considera que el ingreso y expansión de nuevas plataformas digitales puede haber cambiado de manera significativa el mercado, al permitir la proliferación de ciertos tipos de alojamientos, como aquellos con características residenciales y que no se encuentran inscritos formalmente.

“A la fecha, hay escasos análisis sobre si estos alojamientos no inscritos compiten con los que sí lo están, sin perjuicio de que existen claras diferencias regulatorias entre ambos, las que podrían estar generando distorsiones en el mercado”, sostuvo la Fiscalía.

En segundo lugar, la FNE advierte que los mecanismos de sugerencia de precios que ofrecen las agencias de viaje online a los hospedajes podrían tener efectos en la evolución competitiva del mercado.

En esa línea menciona que es importante revisar el impacto de estas prácticas, “ya que, si bien podrían permitir calibrar de mejor manera la oferta en respuesta a las alzas o bajas de demanda, también podrían suavizar la competencia, resultando en precios por sobre los niveles competitivos”.

En tercer lugar, la FNE detectó que las agencias de viaje online podrían estar aplicando de manera generalizada cláusulas que podrían afectar la evolución competitiva del mercado.

Entre éstas, se contarían algunas que impiden a los hospedajes ofrecer precios más bajos a través de sus propios canales o en cualquier otro canal de venta.

“La aplicación de tales condiciones podría socavar la capacidad de los establecimientos para atraer reservas directas o suavizar la competencia entre plataformas. A pesar de que diversas autoridades de libre competencia se han referido a este asunto, existe escasa evidencia empírica sobre sus efectos competitivos”, comentó la FNE.

El estudio abarcará todas las etapas del mercado, tales como el avisaje, que corresponde a la publicidad de los hospedajes dirigida a los consumidores finales; el canal de reserva, mediante el cual el consumidor agenda y paga el servicio escogido; y los establecimientos de hospedajes.

La FNE definió un calendario de trabajo que contempla una fase de recopilación y análisis de información, que se extenderá entre marzo y noviembre de este año; la publicación de las conclusiones preliminares, en diciembre; y la entrega del informe final, en marzo del 2024.