Una extraña desaparición se produjo mientras un hombre se transportaba en una barcaza desde Quellón hasta Coyhaique. El sujeto de 30 años no ha tomado contacto con su familia, motivo por el que los parientes solicitan cualquier información que les ayude a encontrar su paradero.

Alfonso Rosas viajó, la semana pasada, desde Rancagua hacia Aysén para ver a su familia. Sin embargo, el pariente que lo acompañaba notó que Alonso no aparecía por ningún lado, lo cual le resultó bastante extraño, ya que se encontraban navegando en la barcaza “Jacaf” que los transportaba desde Quellón hacia Coyhaique.

Al recalar el navio en Puerto Cisnes, evidenció que el joven no estaba en ninguna parte. Ni siquiera en el camión que los transportaba con rumbo a la capital regional, siendo la última vez que se supo de él, el 22 de mayo a las dos de la mañana mientras navegaba.

“Mi sobrino salió desde Rancagua por un problema que tuvo con su pareja. No trajo documentos, subiéndose como no documentado y al llegar a destino, en la mañana, mi primo se percató que no estaba viéndolo la última vez a las dos de la mañana no encontrándolo por ningún lado”, dijo la tía del joven, Alexa Nenen.

Alfonso no ha tomado contacto con nadie lo que mantiene muy angustiados a sus familiares, quienes temen lo peor. Incluso barajan la posibilidad de que se haya caído al agua o se haya ido con otro transportista sin avisarle al pariente que viajaba con él.

“Así que hago un llamado a reconocer a mi familiar por las fotografías que andan circulando vía facebook y avisar a la familia”, agregó la tía, pidiendo ayuda a la comunidad.