Canadá se declaró “consternada” este miércoles tras la condena del pastor canadiense Hyeon Soo Lim a una pena de cadena perpetua con trabajos forzados en Corea del Norte.

“Canadá está consternada por la excesivamente dura sentencia proferida contra el señor Lim por un tribunal de Corea del Norte, particularmente considerando su edad y su frágil salud”, señaló un portavoz de la cancillería canadiense en un comunicado.

Lim, nacido en Corea del Sur y quien ejercía en Toronto como pastor de la Iglesia Presbiteriana Coreana de la Luz, fue detenido por las autoridades norcoreanas en enero tras llegar desde China.

Se trata del cuarto pastor extranjero que ha sido arrestado, deportado o detenidos en Corea del Norte acusados de intromisión en asuntos internos.

Otro misionero surcoreano detenido en Corea del Norte en octubre de 2013, Kim Jeong-Wook, purga actualmente una condena perpetua a trabajos forzados.

En noviembre de 2014 Pyongyang liberó a Kenneth Bae, un ciudadano estadounidense de origen coreano condenado a 15 años de trabajos forzados, tras las gestiones realizadas en secreto por el jefe de la inteligencia norteamericana, James Clapper.