Con salas inundadas, sin comedor ni puertas en los baños, se encuentra funcionando el Colegio Betesda, por ello los integrantes del Centro de Padres del recinto acusaron estas malas condiciones y pidieron a los sostenedores que se hagan responsables.

Los apoderados reclamaron que el colegio de la Fundación Cristiana Betesda, se inunda cada vez que llueve, que los baños no tienen puertas y que el gimnasio es ocupado como comedor y nadie les da respuestas.

Mirta Díaz, presidenta del Centro de Padres, denunció que el establecimiento no parece colegio, sino una bodega.

Marlene Ojeda, secretaria del Centro de Padres, comentó que en 13 años, nadie les ha dado respuesta y que las condiciones en las que se encuentra el colegio, son miserables.

Las apoderadas del establecimiento de la Población Bernardo O’Higgins señalaron que la sostenedora no ha querido reunirse con ellos, razón por la cual exigen su renuncia.