En su domicilio de calle Suecia, en Providencia y desde las 15:30 horas, el cardenal Francisco Javier Errázuriz prestará declaración ante el ministro de fuero, Juan Muñoz Pardo, en el marco de la demanda civil presentada por el caso Karadima.
La acción legal fue interpuesta por tres de las víctimas de abusos del cura Fernando Karadima, James Hamilton, Juan Carlos Cruz y José Andrés Murillo, en contra del Arzobispado de Santiago, buscando una indemnización de $450 millones por el actuar negligente de la Iglesia.
Aunque lo hace en calidad de testigo, Errázuriz es sindicado por las víctimas como encubridor de las primeras denuncias en contra del párroco de El Bosque, en el 2005.
Para uno de los abogados demandantes, Juan Pablo Hermosilla, el actuar irregular del arzobispado en torno a Karadima, quedó aún más de manifiesto con los correos entre Errázuriz y el actual arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati.
Por su parte, el capellán de la Universidad Católica, sacerdote Hugo Tagle, se manifestó contrario a la crítica del jurista, señalando que sin las acciones de Errázuriz y Ezzati, el caso hubiese quedado impune.
En tanto y a minutos que se desarrolle esta importante diligencia, una de las víctimas, José Andrés Murillo, se manifestó confiado en que Errázuriz dirá la verdad.
Dos de las víctimas de abusos de Karadima, Murillo y Hamilton, asistirían a esta diligencia, situación permitida en esta etapa del proceso civil.
Además, durante las próximas horas, se espera que el juez determine una nueva fecha para interrogar al cura Fernando Karadima, quien el lunes no llegó a declarar acusando “problemas de salud”, según indicaron sus abogados, solicitando que esta diligencia sea desarrollada en el convento donde cumple el castigo del Vaticado, situación que, según fuentes de Radio Bío Bío, el ministro Muñoz rechazaría ordenando su comparecencia en Tribunales.
