Las fuerzas armadas kurdas expulsaron a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) de 14 localidades cristianas asirias del noreste de Siria, que controlaban desde febrero pasado, anunció el miércoles una ONG.

“Al término de una ofensiva de diez días, los combatientes kurdos tomaron el control, al inicio de la semana, de las 14 localidades asirias que el grupo EI controlaba desde febrero”, dijo a la AFP Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

El 23 de febrero, el EI se lanzó a la conquista de la región de Jadur, donde hay 25 ciudades asirias, y los yihadistas se habían hecho desde entonces con el control de 14 de ellas, obligando a huir a más de 5.000 personas.

Esta minoría, de las más antiguas convertidas al cristianismo, está representada por unas 30.000 personas en Siria, el 2,5% de los 1,2 millones de cristianos del país.

Son mayoría en 35 ciudades de la provincia de Hasake, en el noreste del país, actualmente en manos de las fuerzas kurdas y en algunos casos, del régimen.

Según Osama Edward, director de la red asiria de derechos humanos (RADH), con sede en Estocolmo, “el control de las ciudades por parte de los kurdos se produjo tras violentos bombardeos de la coalición internacional” antiyihadista liderada por EEUU, aunque los extremistas aún mantienen como rehenes a 210 asirios.

El EI aprovechó la guerra que ya dura en Siria más de cuatro años para implantarse en el país, y en la actualidad ya controla el 50% de territorio, según el OSDH.