La absolución de Martín Larraín por el atropello y muerte de Hernán Canales -ocurrido en septiembre de 2013 en Curanipe, Región del Maule- continúa generando reacciones en el ámbito político.
Los ministros de Justicia y de Transporte concordaron en que se debe respetar lo dictaminado por el Ministerio Público, pese a que no se esté de acuerdo por una de las partes involucradas en los hechos.
El ministro de Justicia, José Antonio Gómez, calificó como “muy compleja” la situación ante lo dictaminado, señalando que afecta a la ciudadanía dejando un sentimiento de incertidumbre por el sobreseimiento ocurrido. Además agregó que “es importante respetarlo a pesar de que uno no lo comparta”.
Gómez reiteró que el sistema no permite al Ministerio Público recurrir de nulidad ante el fallo del Tribunal Oral en Lo Penal de Cauquenes y que sólo queda respetar la decisión.
El ministro de Transporte, Andrés Gómez-Lobo, aseguró que si el fatal atropello de Hernán Canales hubiese ocurrido después de la implementación de la Ley Emilia, el caso habría tenido otras consecuencias.
Desde el gobierno reiteraron que la aprobación de la Ley Emilia fue promulgada con celeridad para poner fin a las sensaciones de injustica, como pasa ante diferentes situaciones donde dictamina la justicia.
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