Esguinces de tobillo, dolor de rodillas y de espalda, y contracturas musculares, son las lesiones más comunes en las prácticas deportivas del verano.
La temporada primavera-verano nos invita a la práctica de deportes y actividades al aire libre, sin embargo, muchas veces olvidamos o desconocemos ciertas reglas para evitar la aparición de lesiones.
La Jefa de Carrera de Técnico Deportivo de la Universidad del Pacífico, Andrea Lobos, indica que la lesión más habitual de los deportes de verano son los esguinces de tobillo, causados principalmente por el trote en superficies irregulares como la arena de playa o los cerros, y por la falta de equipamiento deportivo adecuado.
A ello se suman los dolores de rodillas, de espalda y contracturas musculares debido a la fatiga, la falta de entrenamiento durante el año y el sobreesfuerzo.
Para evitar este tipo de dolencias, Andrea Lobos señala que es importante mantener una rutina de ejercicios de calentamiento previo a la actividad.
“Estas deben incluir elongaciones musculares generales y movimientos articulares por cada segmento. Es ideal que esta rutina se repita al finalizar la actividad deportiva, para evitar lesiones”, destaca.
Además, la especialista aconseja que lo ideal es realizar deporte de manera progresiva y sin sobre exigirse, para así lograr una preparación previa para la práctica deportiva elegida, evitando comenzar a entrenar de golpe al salir de vacaciones.
“Se recomienda iniciar con una rutina dividida en tres sesiones semanales, de media hora de duración. Lógicamente, depende del tipo de trabajo que realice la persona y su nivel de inactividad. El deporte debe estar siempre acompañado de una dieta balanceada, dormir las horas adecuadas, utilizar implementación deportiva adecuada y siempre realizarse un chequeo médico previo a la práctica deportiva”, concluye La Jefa de Carrera de Técnico Deportivo de la Universidad del Pacífico.
7 claves para evitar lesiones
De acuerdo al portal de bienestar Salud180, debes tomar ciertas precauciones para evitar las lesiones al ejercitarte.
- Calentar y enfriar. Siempre calienta antes de comenzar, luego enfría al terminar, y no te olvides de realizar estiramientos.
- Evitar el exceso de ejercicio. Aumenta la intensidad de los ejercicios en forma progresiva con el pasar de los días, no de golpe.
- Toma descansos entre los ejercicios y también entre días si es necesario.
- Usa un buen calzado que te proteja del impacto.
- Evita las superficies de concreto, prefiere las superficies más blandas como el pasto o la tierra, ya que éstas amortiguan el impacto.
- Varía los ejercicios, no hagas lo mismo todos los días. Puedes alternar cardio con fuerza, o un día correr y al otro andar en bicicleta, etc.
- Si notas que algo anda mal, detente y consulta a un médico.
