Los dirigentes del pacto Nueva Mayoría temen que la ceremonia que prepara La Moneda tenga como objetivo final validar el golpe de Estado que encabezó Augusto Pinochet el 11 de septiembre de 1973.

Sus aprensiones se basan en que ha trascendido que el presidente Sebastián Piñera, que sería el único orador, pretende contextualizar el derrocamiento de Salvador Allende, subrayando que fue una consecuencia del gobierno de la Unidad Popular y que las responsabilidades son compartidas por todos los sectores.

El secretario general del Partido Comunista, Lautaro Carmona, aseguró que su colectividad no asistirá si es invitada porque no está disponible para avalar una maniobra mediática.

El Movimiento Amplio Social, MAS, tampoco asistirá si es invitado al acto del Gobierno porque a juicio de su presidente, el senador Alejandro Navarro, tanto el mandatario como su candidata presidencial, Evelyn Matthei, no están en condiciones de ofrecer un espacio para la reflexión y el reencuentro. Dijo esperar que el jefe de Estado no caiga en la tentación de justificar el golpe.

En el Partido Socialista, en tanto, prefieren no especular sobre su posición frente a un acto sobre el cual no se conocen sus contenidos y tampoco si serán invitados. Sin embargo, su secretario general, Francisco Javier Díaz, anticipó que personalmente no está disponible para asistir a una actividad que –a su parecer- tiene más de pirotecnia televisiva que de reflexión.

El secretario general del PPD, Gonzalo Navarrete, dijo que la eventual asistencia de su partido dependerá del sentido que el Gobierno quiera dar a la ceremonia. Reconoció temor a que el presidente Piñera intente justificar el golpe de Estado.

El vicepresidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chahín, dijo que a priori no pueden restarse de una eventual convocatoria del gobierno, pero precisó que dependerá del sentido del acto.

El acto del gobierno para conmemorar el 40º aniversario del Golpe Militar aún no tiene fecha definida, pero se realizará el 9 o el 10 de septiembre.