La sesión de este lunes del Concejo Municipal de Los Ángeles estuvo marcada por incidentes, incluido un duro intercambio de opiniones entre dos integrantes del cuerpo colegiado por la situación de los clubes de adultos mayores.

Se trató de una de las reuniones más tensas desde que los concejales asumieron sus funciones el pasado 6 de diciembre.

Los incidentes comenzaron cuando Ana María Rubio irrumpió en el encuentro para clamar por ayuda para su hijo, aquejado de una delicada afección cardíaca.

La mujer incluso se desmayó y debió ser socorrida en el mismo lugar. Su caso se derivó al área social.

En forma paralela, un grupo de seis vecinas de la villa Génesis protagonizó una ruidosa protesta para exigir la restitución en sus funciones de la directora del jardín infantil del sector. Sobre esto el municipio aún no se ha pronunciado.

Sin embargo, lo que más llamó la atención fue la polémica entre las concejales María Barra y Yasna Quezada.

La primera acusó a la segunda de hostigar a los clubes de adultos mayores, para que supuestamente se integren a un centro de atención, el cual funciona al alero de la oficina parlamentaria del diputado Joel Rosales, pareja de Quezada.

Al respecto, la concejala Yasna Quezada declinó referirse a los dichos de su colega, afirmando que no quiere hacerse mayores complicaciones al respecto.

No obstante, Quezada sí planteó sus críticas respecto de la contratación y asignación de funciones en la Dirección Comunal de Educación, mencionando varios nombres de quienes, a su juicio, no cumplen con la legalidad.