Unos cincuenta activistas de “Ocupemos Wall Street” (OWS) se manifestaron el martes en Nueva York para pedir la renuncia del jefe de la policía local tras las detenciones que tuvieron lugar el sábado pasado durante una protesta del movimiento.

Varios de los manifestantes se arrodillaron con la boca tapada con cinta adhesiva y las manos atadas detrás de la espalda como si estuviesen esposados frente al cuartel general del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD, según sus siglas en inglés), en el sur de Manhattan.

“Kelly debe renunciar”, rezaba una banderola que encabezó el cortejo y que hacía referencia al jefe del NYPD, Raymond Kelly.

La policía neoyorquina detuvo en la noche del sábado a docenas de manifestantes de OWS en Zuccotti Park, donde los activistas se habían dado cita para conmemorar los seis meses del nacimiento del movimiento que denuncia la corrupción y la avaricia del mundo de las finanzas.

Según OWS, hubo 90 arrestos y cinco hospitalizados por el accionar policial. Muchas de esas personas seguían detenidas el martes.