La agencia de calificación financiera Moody’s rebajó el miércoles un grado la nota a largo plazo del grupo petrolero hispano-argentino Repsol YPF, a Baa2, debido sobre todo a sus resultados más bajos de lo previsto en 2011.

“La degradación de la nota refleja un alza del endeudamiento y el deterioro de los datos financieros publicados por Repsol en 2011, como consecuencia de resultados más débiles de los previstos, mientras las inversiones necesarias para financiar proyectos claves de crecimiento aumentaron de manera significativa”, explicó Moody’s.

La nota está dotada de una perspectiva estable, lo que significa que la agencia por ahora no tiene la intención de reducirla más a medio plazo.

En su comunicado, Moody’s reconoce “el carácter no recurrente de algunos factores” que afectan a Repsol, como las revueltas populares en Libia y las huelgas de Argentina, pero consideró que el grupo “tendrá como reto particularmente importante la reducción de su deuda en los dos o tres próximos años”.

Sobre todo que las inversiones eran un 24% más altas en 2011 respecto a un año antes, mientras que el grupo explora nuevos yacimientos, principalmente en Brasil.

La agencia calculó que el ratio entre la liquidez mantenida por el grupo y su deuda neta cayó en 2011 a un 18%, contra el 33% del año precedente.