El denominado Asalto al Polvorín del Regimiento Tucapel, ocurrido en 1973, fue recreado anoche por decisión del ministro con dedicación especial para investigar delitos relacionados con violación de derechos humanos. Decibeles de explosiones deteminarán la exactitud de versiones opuestas del episodio.
Luego de 38 años de la muerte de 7 militantes comunistas en el denominado Asalto al Polvorín del Regimiento Tucapel, el ministro Alvaro Mesa realizó una pericia acústica de hechos ocurridos al interior del recinto castrense en noviembre de 1973, oportunidad en que se hizo creer a la comunidad que se había pretendido asaltar la sección polvorín del regimiento.
La pericia consiste en la medición de los decibeles de las detonaciones que se habrían realizado en la fecha de los hechos, dijo el abogado que representa a organizaciones de derechos humanos de Temuco, Sebastián Saavedra.
Un camión multiproposito UNIMOG trasladó a personal del Ejército hasta la Isla Cautín, reconstituyendo la ruta que habría seguido la noche del 10 de noviembre del 1973, llevando en su interior a las siete víctimas del delito de lesa humanidad.
Las víctimas del episodio Polvorín son Juan Chávez, Pedro Mardones, Amador Montero, y Juan Ruiz, todos estudiantes de la Universidad Técnica del Estado de Temuco, además de Florentino Molina, obrero, Víctor Valenzuela, auxiliar y Carlos Aillañir, obrero agrícola.
