El ex presidente checo Vaclav Havel, que durante largo tiempo estuvo alejado de la vida pública por enfermedad, falleció el domingo de madrugada a los 75 años, anunció su oficina.

El artífice de la “Revolución de terciopelo” anticomunista de 1989, jefe del Estado checoslovaco y luego checo entre 1989 y 2003, murió mientras dormía, según su portavoz, Sabina Tancevova.

Una neumonía mal atendida en la cárcel y un cáncer de pulmón le ocasionaron numerosos problemas de salud. Havel pasó cinco años en prisión durante la era comunista, antes de 1989.

Havel fue operado en diciembre de 1996 de un cáncer del pulmón derecho. Además de una bronquitis crónica, a menudo sufrió problemas cardíacos e intestinales.

Durante los últimos meses, Havel pasaba la mayor parte del tiempo en su casa de campo, situada a 150 kilómetros de Praga, luego de haber sido hospitalizado en marzo por una neumonía grave.

Esta enfermedad fue acompañada por diversas complicaciones, incluyendo “la pérdida del equilibrio, el debilitamiento de la memoria y el adelgazamiento”, explicó Havel en una entrevista.

El sábado de la semana pasada, Havel se reunió en Praga con el Dalai Lama, jefe espiritual de los budistas tibetanos, antes de regresar a su casa de campo.