El astro argentino Lionel Messi, del Barcelona, guió a su equipo en la victoria ante el Real Madrid en la Supercopa (2-2, en la ida; 3-2 en la vuelta), un título con el que su técnico, Josep Guardiola, igualó los 11º trofeos en el banquillo catalán del holandés Johan Cruyff.

La estadística habla tanto por sí misma como también lo hace el estilo de juego que defiende y que ha encumbrado ‘Pep’ y que promoviera en su día Cruyff, “el fútbol total”, inventado por su compatriota Rinus Michels.

Cruyff, ex jugador legendario con el Barça, impuso el fútbol basado en el movimiento continuo y en la circulación del balón, una filosofía que ya vivió momentos de gloria con el ‘Dream Team’ catalán cuando estuvo entrenado por el holandés, entre 1988 y 1996.

El miércoles, en el partido de vuelta de la Supercopa de España, se pudo constatar, una vez más, hasta qué punto ese estilo de juego, con Messi sobre el césped, resulta decisivo, ya que entre los pases constantes de sus compañeros, ‘La Pulga’ recibió y asistió a Andrés Iniesta en el 1-0 (14).

De la mano de Messi, Guardiola, aunque tenga el mismo número de títulos que Cruyff, ha superado al que considera su mentor, ya que ‘Pep’ se hizo con el mismo número de trofeos que el holandés en sólo tres temporadas, mientras que el técnico neerlandés necesitó ocho.

Sin embargo, Guardiola, que jugó a las órdenes de Cruyff en el ‘Dream Team’, siempre minimiza sus éxitos ante quienes le comparan con la leyenda holandesa.

Aunque haya que dejar a Cruyff la paternidad del concepto de juego desarrollado en este momento por el Barcelona, hay que atribuir a Guardiola el mérito de haber llevado esos principios hasta su quinta esencia, gracias a unos jugadores que el propio ‘Pep’ calificó de “eternos y míticos”.

Incluso si siempre resulta difícil levantar estatuas a jugadores que todavía están en actividad, hay que constatar el carácter excepcional del mágico trío que componen Xavi Hernández-Iniesta-Messi, al que no se situó por mero fruto del azar como tres principales candidatos al Balón de Oro de 2010.

Pero en este trío, Messi tiene una dimensión distinta, porque el atacante argentino es un superdotado en un equipo que ya de por sí resultad brillante, en el que ‘La Pulga’ supone un auténtico valor añadido para el grupo que dirige Guardiola.

El miércoles, en el partido decisivo de la Supercopa frente al Real Madrid en el Camp Nou, el argentino anotó dos goles y dio la asistencia del 1-0. Además, Messi, que también marcó un tanto en el 2-2 de la ida, demostró estar en un nivel estratosférico pese a que el campeonato aún no ha comenzado.

Tanto es así que hasta el argentino Jorge Valdano, todo un ex director del Real Madrid, se deshizo en elogios a Messi, mientras que el entrenador ‘blanco’, el portugués José Mourinho, realizó el miércoles varios gestos y declaraciones nada delicadas hacia sus rivales catalanes.

“Está a un nivel increíble”, estimó Valdano, impresionado por la calidad del jugador argentino, que sólo lleva una escasa semana de entrenamiento.

La Liga española, que sigue amenazada por la huelga de futbolistas, puede que no comience el sábado, pero una cosa está clara, este Barcelona de Messi y de Guardiola ha comenzado la campaña con fuerza, y su primer duelo del campeonato de la regularidad le planteará un partido exigente, ante el Málaga.