La policía cargó y desalojó este jueves a los manifestantes reunidos en la Puerta del Sol de Madrid para protestar contra la visita del Papa y la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), constató un periodista de la AFP.

Los manifestantes, que se habían reunido a última hora de la tarde, fueron desalojados a golpe de porra por los agentes de la Puerta del Sol, que antes habían cerrado la plaza para impedir que se repitieran los enfrentamientos verbales de la víspera entre manifestantes y peregrinos asistentes a la JMJ.

“Me han golpeado cinco o seis veces, vamos desarmados, sin hacer absolutamente nada”, dijo a la AFP Bruno, un joven de 30 años, con sangre en su codo.

La policía cargó tras dar la orden a la gente de dispersarse y cuando parecía que los manifestantes se iban, golpeando principalmente en las piernas a los concentrados, algunos de los cuales cayeron al suelo.

Un centenar de policías se habían apostado a última hora de la tarde en la entrada de las calles que desembocan en la Puerta del Sol, algunas de las cuales estaban clausuradas con cintas, mientras las estaciones de metro y trenes de cercanías se cerraron.

En el centro se habían reunido unos 150 manifestantes contrarios a la visita del Papa del movimiento de los “indignados” y de asociaciones defensoras del Estado laico.

La policía redujo poco a poco el perímetro donde se encontraban estos manifestantes, al tiempo que montó otro cordón policial más atrás para separar a un centenar de peregrinos, a los que la policía acabo por hacer circular.

Estos peregrinos increparon a los manifestantes laicos llamándoles “¡hipócritas!” y gritando “¡esta es la juventud del Papa!”, mientras los otros respondieron con “esa mochila la he pagado yo”, en referencia a la mochila entregada a cada uno de los inscritos en las JMJ, por la que, según la organización, cada uno de ellos ha pagado.

Los peregrinos, llegados a Madrid para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que se celebra hasta el domingo, circulaban por la Puerta del Sol, tras participar en el primer gran acto con el Papa en la cercana Plaza de Cibeles, pese a que al final del mismo, la organización había recomendado que no acudieran a esa plaza, donde ya estaban algunos manifestantes.

El miércoles, miles de manifestantes convocados contra el coste y la financiación pública de la visita del Papa y de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) invadieron la Puerta del Sol. En la plaza se enfrentaron verbalmente a jóvenes peregrinos mientras la policía los mantenía separados.

Al término de la manifestación se produjeron choques entre la policía y un grupo de manifestantes, que fueron evacuados por los agentes, lo que causó siete detenciones y 11 heridos.