La Oficina de Investigaciones y Análisis (BEA) francesa anunció el viernes que identificó una serie de errores de pilotaje en el accidente del vuelo A330 de Air France Rio-París que el 1 de junio de 2009 cayó al Atlántico frente a las costas de Brasil con 228 personas a bordo.

El tercer informe sobre las investigaciones técnicas de la tragedia revela que los pilotos no adoptaron el procedimiento adecuado tras los dos primeros incidentes en los últimos minutos del vuelo: la pérdida de indicadores de velocidad -debido a la congelación de las sondas (sensores) Pitot- y la pérdida de sustentación del aparato.

Los pilotos del Airbus de Air France no “identificaron formalmente la situación de pérdida de sustentación” a pesar de la alarma sonora que se activó durante 54 segundos, precisa este informe intermedio de las investigaciones.

El informe precisa que no aplicaron el procedimiento requerido tras la congelación de las sondas (sensores de velocidad) Pitot que provocó la pérdida de las indicaciones de velocidad.

El BEA indicó que los pilotos al mando del aparato en ese momento “no recibieron entrenamiento en alta altitud sobre los procedimientos” adecuados.

El piloto que comandaba la nave, de unos 30 años, efectuaba un pilotaje manual en ese momento pues el pilotaje automática se había desactivado tras perderse las indicaciones de velocidad.

El informe precisa que el comandante del aparato se fue a descansar a las 02H00 de la madrugada sin dejar “consignas claras” a los dos co-pilotos que quedaron al mando del aparato y que regresó a la cabina a las 02H11. La grabación se interrumpe a las 02H14.

El esperado documento indicó que los pilotos tampoco hicieron un anuncio a los pasajeros sobre lo que estaba sucediendo a bordo en los últimos minutos del vuelo.

La compañía aérea Air France reaccionó inmediatamente al informe de la BEA, defendiendo el “profesionalismo” de sus pilotos y poniendo en tela de juicio la fiabilidad de la alarma una vez que el A330 perdió sustentación.

Hasta ahora la BEA consideraba que un desperfecto en las sondas de velocidad fue uno de los factores del accidente, pero siempre dijo que la explicación definitiva se conocería cuando se recuperaran las cajas negras recuperadas en mayo.

Por los errores de pilotaje convencen poco a las familias sobre todo en una investigación en la que están involucrados gigantes de la industria aeronáutica como Air France y Airbus, inculpados en marzo pasado por la justicia francesa por homicidios involuntarios.