Los restos de al menos tres personas fueron encontrados este martes en el estado de Nuevo León, norte de México, semi desintegrados y calcinados, informó el gobierno.

Los restos fueron hallados en un rancho del municipio de Cadereyta junto a cinco cilindros que contenían disel y ácido, una fórmula usada en México por el crimen organizado para ‘cocinar’ (desintegrar) a sus víctimas.

“Son dos los cuerpos que se pueden distinguir y algunos otros restos óseos”, dijo a la prensa Jorge Domene, vocero de Seguridad de Nuevo León.

El vocero no descartó que la cifra de cadáveres pueda aumentar.

“Desconocemos en estos momentos de cuántas personas podamos estar hablando. Los restos están ya en condiciones de estructura ósea y por eso se hace difícil precisar de cuántas personas estamos hablando”, dijo Domene.

Nuevo León, donde se encuentra el polo industrial Monterrey, es uno de los seis estados de la frontera con Estados Unidos, una zona violentada por las pugnas entre narcotraficantes y los operativos antidrogas.