Los velocirráptores, pequeños dinosaurios bípedos carnívoros, eran activos únicamente en la noche, revelaron los trabajos de paleontólogos estadounidenses sobre la forma de los ojos de estos animales.

Este descubrimiento modifica la teoría según la cual los dinosaurios, extinguidos hace 65 millones de años, eran activos solamente durante el día, mientras que los primeros mamíferos conocidos vivían en la noche, explica Ryosuke Motani, profesor de geología en la Universidad de California y co-autor de esta investigación publicada en la revista Science fechada el 15 de abril.

Si los velocirráptores eran únicamente activos en la noche, los dinosaurios herbívoros vivían tanto de día como de noche.

Las aves prehistóricas y los pterosaurios, los reptiles voladores, eran activos durante el día, a excepción de ciertas especies nocturnas. Y los pterosaurios se alimentaban de peces que eran activos por la noche.

Para este trabajo, los investigadores comenzaron a estudiar la estructura del ojo de 164 especies, entre ellas mamíferos, reptiles y pájaros cuyo período de actividad durante el ciclo de 24 horas está bien establecido.

Determinaron que la estructura del ojo variaba si los animales eran diurnos, nocturnos o ambos.

Se trata más específicamente de la longitud de la órbita y del diámetro del anillo neuroretinal que optimizan la agudeza visual según la intensidad de la luz, explicaron los científicos.

También examinaron los fósiles de 33 acrosaurios (grupo que incluye a los dinoasaurios y los pterosaurios- del Mesozoico, período que inició hace 245 millones de años y culminó hace 65 millones.

Los investigadores pudieron deducir, al comparar las características del ojo de las especies vivientes y las de los fósiles, los ciclos de actividad de los animales extinguidos.