Tras la aprobación de la termoeléctrica Castilla, los vecinos y comuneros agrícolas presentaron un recurso de protección para impedir la construcción del proyecto.

La misma tecnología que iba a utilizarse en la termoeléctrica de Punta de Choros que fue rechazada por el Gobierno es la que usará la central Castilla, por lo que los lugareños no entienden por qué fue aprobado el proyecto.

Además aseguran que el uso que le dará la empresa al agua de mar para enfriar las turbinas, elevará la temperatura de esa parte del océano a lo menos en 8 grados, lo que eliminará el zooplancton y modificará el ecosistema.

Por estas razones el vocero de la Junta de Vecinos y de la Comunidad Agrícola del Totoral, que es donde se construirá Castilla, Enri Saldaño, decidió presentar un recurso de protección para impedir su funcionamiento.

Pero no sólo en el Totoral están molestos, ya que a juicio de la directora ejecutiva del Programa Chile Sustentable, Sara Larraín, la decisión se tomó en esta época para dejar de lado la visión ciudadana.

En cuanto a la polémica que generó la decisión de la Secretaría Regional Ministerial de Salud de Atacama de revertir la decisión que había catalogado como contaminante el proyecto, para declararlo molesto, el diputado UDI, Carlos Vilches, aseguró que se debió a un error de la anterior administración.

La central a carbón estará emplazada al interior de la Hacienda Castilla, en el sector de Punta Cachos.