En la comuna de Santa Cruz, autoridades locales y habitantes se han quejado por el lento proceso de reconstrucción tras el terremoto.

En la provincia de Colchagua, de 35 mil habitantes, 11 personas murieron y 3 mil casas resultaron dañadas a causa del terremoto.

La percepción de sus habitantes es que el proceso de reconstrucción ha sido lento y la preocupación de quienes lo perdieron todo es aún mayor al tener que pasar un nuevo invierno en mediaguas.

Los vecinos del campamento Villa Esperanza, del sector Paniagua, viven frente a sus departamentos destruidos por el terremoto y esperando que las autoridades agilicen la entrega de sus nuevas viviendas.

Según el alcalde de Santa Cruz, Hector Valenzuela (PS), aproximadamente 2 mil casas deben construirse, pero hasta ahora sólo una se ha levantado.