El director del Servicio de Salud Ñuble, doctor Jaime Guzmán, hizo un llamado a la comunidad a evitar los piqueros y clavados en piscinas y ríos de la región, porque puede traer graves consecuencias para su integridad física, como las ocurridas recientemente a dos personas que padecen traumatismo raquimedular por haberse lanzado de esas maneras a las aguas.

El médico Guzmán, junto al jefe de la Urgencia del Hospital Clínico Herminda Martín, doctor Oscar Ramos, expresó que el verano trae muchas cosas buenas, pero también preocupantes prácticas que pueden poner en riesgo la vida de adultos y niños.

“Un ejemplo de ello son los piqueros, expresó. Una mala caída puede ser mortal o cambiar para siempre la vida. De hecho, se pueden ocasionar severos daños en la columna y, en muchos casos, cuadros irreversibles de tetraplejia, que dejan a las víctimas postradas o en una silla de ruedas”, indicó el doctor Guzmán.

“El lanzarse con un piquero de mala forma en un lugar inadecuado, puede provocar un golpe en la cabeza con el fondo, con un tronco o piedra, generando un movimiento extremo de la columna cervical, lesionando músculos y ligamentos que la protegen. También se pueden comprimir y destruir las vértebras cervicales, dañando de forma irreversible la médula espinal, ya que a pesar de su compleja fisiología, carece de capacidad de regeneración, de tal forma que una pequeña lesión puede tener como consecuencia una gran repercusión neurológica”, explicó el doctor Guzmán.

En tanto, el facultativo Óscar Ramos lamentó los últimos casos por traumatismo raquimedular que tuvieron como protagonistas a dos jóvenes de 14 y 15 años, registrados hace pocos días.

En ambas situaciones, los jóvenes habían intentado practicar un “piquero” y terminaron golpeando la cabeza contra el fondo de la piscina. La situación es preocupante, pues durante todo el año 2010 se contabilizaron dos casos y este 2011 en sólo una semana ya se registran dos.

Por eso, los médicos reiteraron su llamado a los padres y jóvenes a tomar conciencia sobre esta situación absolutamente evitable.

“Como vemos, son situaciones trágicas porque la mayoría de las veces los afectados son jóvenes y la lesión medular es una condición crónica en que la persona va a requerir asistencia completa para la mayoría de las actividades de la vida diaria. Es gente activa y en la etapa más productiva de la vida y es algo totalmente evitable”, expresó el doctor Guzmán.

El servicio de Salud formuló otras medidas de prevención, tales como bañarse sólo en balnearios y lugares autorizados; no lanzarse al agua en lugares desconocidos para evitar el impacto con rocas u otros elementos como troncos o ramas que puedan ocasionar daño.

También, no ingresar al agua después de haber ingerido alcohol, o de haber comido en forma reciente; no correr alrededor de las piscinas porque puede resbalar y caer.

Del mismo modo, asegurarse muy bien del nivel de agua de un río o piscina; cerciorarse de que la piscina tenga escaleras que permitan el acceso y la evacuación y que los filtros tengan su reja de protección.

Y a los padres y madres, jamás perder de vista a sus hijos e hijas, sobre todo si son pequeños.