Para los turistas es habitual que en cada ciudad existan artistas que ofrecen su arte por una donación, pero en Frutillar uno de ellos llama la atención por la originalidad del oficio que cultiva.
Una gaita frente al Lago Llanquihue puede sonar extraña, considerando que el instrumento es tradicional al otro lado del Atlántico, especificamente en Escocia, sin embargo esta semana quienes visiten Frutillar podran disfrutar del agradable sonido de este inmstrumento.
Viajando desde Noruega al sur llegó Esteban Alul quien junto a su gaita deleitan a quienes pasean por la costanera en Frutillar con suaves melodías en un instrumento que llama la atención tanto po el sonido tradicional escocés como por su tamaño y destreza para interpretarlo.
Pero este juglar no sólo vive para la música, tambien dedica parte de su tiempo a enseñar tal como lo hizo en la región de la Araucanía .