Antes de marzo el Consejo Regional Metropolitano debiera votar el proyecto de expansión urbana de Santiago. La ampliación se concretará en 7 comunas de la capital.

La medida se ejecutará cambiando los usos de suelo, actualmente agricolas, por otros que permitan la expansión de la urbe.

El intendente Fernando Echeverria, estimó en 200 mil las familias que necesitan una solución habitacional y aseguró que, gracias al proyecto, en 4 años podrían terminar con el problema.

No obstante, Patricio Herman, de la Agrupación Defendamos la Ciudad, dispara contra el intendente asegurando que este proyecto beneficia a las inmobiliarias, ya que solo el 8% de los terrenos se proyectan para viviendas sociales.

Las críticas se repiten por parte del dirigente de la Federación Nacional de Pobladores, Alexis Venegas, quien asegura que la baja densidad habitacional que este contempla hará inviable la ejecución de proyectos sociales.

Las comunas contempladas para la expansión de Santiago son: Quilicura, Pudahuel, Cerro Navia, La Pintana, Maipu, San Bernardo y Puente Alto. Las opiniones de sus alcaldes estan divididas, mientras algunos la apoyan, otros presentan objeciones.

El alcalde de Quilicura, Juan Carrasco, solicita una compensación para las comunas que ya estan saturadas y que no resistirían más habitantes.

Todo queda en manos de los 26 consejeros regionales, representantes de los partidos políticos con representación parlamentaria, quienes deberan evaluar el proyecto que se presentó hace 4 años durante la administración de Bachelet.