El tradicional sorteo de navidad de la lotería española, que cuenta con la mayor dotación económica del mundo, repartió 2.320 millones de euros en premios este miércoles a cientos de afortunados ganadores por todo el país, que cuenta con una de las mayores tasas de paro de Europa.

Lotería de Navidad

Lotería de Navidad

El primer premio, el popular “Gordo”, recayó este año en el número 79.250, del que hay 1.950 décimos (billetes, ndlr), cada uno de los cuales le reportará a su poseedor 300.000 euros (395.000 dólares).

El número ganador se vendió principalmente en Barcelona, pero también repartió alegría en Madrid y Alicante.

“Nunca en mi vida he llorado tanto como esta mañana”, dijo José Antonio Maldonado, propietario de un bar en la localidad de Palleja, cerca de la capital catalana, que vendió 600 de los décimos ganadores a sus clientes.

“Conozco muchos casos de gente ahogados por la crisis y que les ha tocado la lotería en mi bar. Me siento un Robin Hood”, dijo a los periodistas, rodeado por un grupo de afortunados ganadores.

“A partir de ahora seguiré trabajando y pagando la hipoteca, pero más feliz”, concluyó Maldonado, quien también se quedó con uno de los billetes premiados.

Igual de alegre se mostró la ecuatoriana de 32 años Piedad Arévalo, cuya hija de 17 años, Rosa, ganó 300.000 euros gracias a un décimo que compró en Alicante.

“El dinero nos viene muy bien”, dijo a los reporteros.

Los niños del colegio de San Ildefonso, un antiguo orfanato, se encargaron de cantar el número ganador del “Gordo” en el curso de un sorteo que suele durar unas tres horas y se televisa a toda España.

Uno de los niños cantó la cantidad del premio y otro el número ganador antes de llevar las bolas a los notarios para levantaran acta del sorteo.

Miles de personas más han ganado premios menores en este sorteo de Navidad, una de las grandes tradiciones de los españoles en esta época del año desde que empezó en 1812.

Mientras otras loterías tienen mayores premios individuales, “El Gordo” es considerado el sorteo que más dinero reparte en premios.

Este año, las ventas de décimos cayeron sólo un 0,26% hasta los 2.695 millones de euros (3.542 millones de dólares) a pesar de la crisis económica que atraviesa España, con una tasa de desempleo de en torno al 20%, la más alta de la Unión Europea.

“Es un ritual sin el cual la Navidad no está completa”, dijo el director general del Organismo de Loterías y Apuestas del Estado, Gonzalo Fernández, a la televisión pública española.

Los décimos, que cuestan 20 euros cada uno y se venden desde julio, son elegidos por los españoles, a menudo, buscando números que reflejen fechas significativas.

El número correspondiente a la fecha en que España ganó el Mundial de Sudáfrica el 11 de julio — 11710 — fue uno de los más buscados al igual que el correspondiente a la visita de dos días a España del Papa Benedicto XVI el mes pasado — 61110 y 71110.

Compañeros de trabajo, amigos y familiares por todo el país se unen en ocasiones para comprar billetes y bares y cafés venden décimos a sus clientes.

España prácticamente se paraliza el día del sorteo, durante las tres horas del evento, mientras la gente se pega a la radio, la televisión o internet para ver si su número es el afortunado.

El organismo de loterías estatal estimó que cada español se gastó de media 59,74 euros en jugar al “Gordo” este año, del que un 70% de las ventas se destina a premios y el resto acaba en las arcas de la Hacienda pública.