La líder opositora birmana Aung San Suu Kyi y el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, hablaron por teléfono el jueves y renovaron su pedido de que los militares del gobierno de Rangún libere a los restantes presos políticos, informó un portavoz del organismo internacional.

El secretario general y Aung San Suu Kyi, liberada el sábado tras cerca de 20 años de arresto, “subrayaron la necesidad de que las autoridades birmanas liberen a todos los prisioneros políticos” de modo que el país pueda “avanzar (…) en la reconciliación nacional y la transición democrática”, declaró el portavoz.

Ban Ki-moon “dijo a Aung San Suu Kyi que estaba estimulado por el espíritu de reconciliación proveniente de sus declaraciones y de sus llamados al diálogo”, desde que fue puesta en libertad.

Suu Kyi invitó a Ban a viajar a Birmania.