Como “tibio” y “tardío” calificó el abogado Juan Pablo Hermosilla el mea culpa del cardenal Francisco Javier Errázuriz respecto a la postura inicial de la Iglesia en el caso del sacerdote Fernando Karadima.

En declaraciones al periódico estadounidense New York Times, el arzobispo de Santiago admitió que “si se nos presentara un nuevo caso, hoy haríamos las cosas mucho mejor”.

Reconoció, además, que cuando empezaron a aparecer las denuncias “desafortunadamente, en ese tiempo, juzgué que las acusaciones no eran creíbles”.

Así se refirió por primera vez a las denuncias que hicieron en marzo de este año los profesionales James Hamilton, José Murillo, Juan Carlos Cruz, Fernando Batlle y Luis Lira.

Los cinco jóvenes en las década de los 80 y 90 formaron parte de la comunidad de la iglesia del Sagrado Corazón de el Bosque, a cuyo párroco ahora acusaron de someterlos abusos sexuales.

El abogado que los representa, Juan Pablo Hermosilla, criticó el momento y el contenido de los dichos del cardenal Errázuriz a la prensa extranjera.

Además, el abogado apuntó que ningún miembro de la jerarquía de la Iglesia Católica se ha contactado con sus clientes para ofrecer ayuda o al menos una disculpa.

En tanto, el vicario general de Arzobispado de Santiago, Cristián Precht, dijo que el proceso “ha sido doloroso” para ellos y para los afectados.

Asimismo, se manifestó confiado en lo que resuelvan los tribunales de justicia y el Vaticano respecto al futuro del cura Karadima.

En lo netamente judicial, la defensa de los denunciantes pidió acceso al sumario y algunas diligencias que el abogado Hermosilla no quiso precisar.