6 meses lleva esperando ayuda un precario campamento instalado en Tomé, que fue emplazado en una cancha expuesta a vertientes de agua y barro.
Es en ese lugar donde varias familias provenientes de la Caleta Los Bagres deben convivir con la humedad y el frío, ya que sus improvisadas mediaguas están ubicadas en un terreno demarcado como zona no-apta para vivir.
En la parte superior de este cerro serán emplazadas las mediaguas
Son cerca de 50 personas que diariamente deben compartir tan sólo dos baños químicos que les entregó la Municipalidad y que no han recibido limpieza en más de 15 días.
Además, no cuentan con duchas ni tampoco víveres, y denuncian que no les ha llegado ningún tipo de carpa o material para construir, todo se lo han conseguido ellos con su propios medios, sin embargo son recursos insuficientes debido a la cesantía.
Los pobladores del campamento deben sobrevivir por su cuenta, ya que no han recibido “visitas solidarias” y según señalan, el Gobierno les ha prometido varias cosas, pero aún no hay nada concreto.
La lluvia y el barro aumentan los problemas del campamento
Hay muchos niños y madres que están con bebés pequeños bajo estas terribles condiciones, gente que antes de la fatídica noche del 27 de febrero tenía casa, trabajo y una vida muy distinta a la de ahora.
Así lo indica Irene Salgado, Dirigenta del campamento
La mayoría de las familias, además de perder sus casas, perdieron sus terrenos, ya que los derrumbes de tierra y deslizamientos de roca dejaron inhabitable la Caleta.
Estos pescadores que perdieron todos sus materiales de trabajo, señalan que ni siquiera han recibido apoyo sicológico para sus familias, contando que incluso una mujer perdió a su pequeño hijo de 1 año y 7 meses, el que murió aplastado por las rocas en el derrumbe del cerro.
Los afligidos damnificados comentaron a La Radio que el alcalde Eduardo Aguilera les prometió que a todos les llegaría “una bolsa de mercadería” cada semana, pero “de aquello nunca se supo nada”.
Finalmente, la gente se encuentra a la espera de los estudios de suelo, pero los geólogos tampoco se han hecho presentes en el sector, los pobladores señalan que hace algunos meses los expertos demarcaron con rojo los lugares donde se ubica la falla geológica, que abarca un perímetro de más de 1 kilómetro. Sin embargo los estudios completos en la zona jamás llegaron a realizarse.
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