El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, viajó este martes en un avión de la Fuerza Aérea Brasileña con destino a Sao Paulo para hacerse atender en una clínica especializada, del cáncer en los ganglios que le fue detectado el viernes, observó la AFP.
Entre lágrimas y aplausos de sus colaboradores y funcionarios, el mandatario abordó la aeronave que lo trasladó a la capital paulista donde será internado en el hospital Sirio-Libanés.
En el nosocomio le practicarán análisis entre este martes y el miércoles para establecer la gravedad de la enfermedad.
El gobernante de 59 años, un ex obispo de la Iglesia Católica, partidario de la teología de la liberación, padece un linfoma. Le descubrieron dos tumores, uno en los ganglios de la ingle y otro en el tórax.
La ministra de Salud, Esperanza Martínez, trató de tranquilizar a la población, al divulgar hoy resultados de muestras que fueron llevados el fin de semana a Estados Unidos. Estos reportaron que el mal es “de baja malignidad”.
Antes de viajar, el jefe de Estado entregó el poder al vicepresidente Federico Franco, en un acto en el aeropuerto internacional “Silvio Pettirossi”.
Lugo viajó con su jefe de seguridad, su secretario general y secretario privado, su encargada de protocolo, el portavoz oficial y su hermano Pompeyo Lugo.
“Nuestra familia está más unida que nunca y vamos a estar en permanente oración para que todo salga bien”, dijo a periodistas su sobrina Mirtha Lugo.
