La Iglesia católica, implicada en escándalos de pedofilia, debe estar “en posición de decir que no tiene nada que esconder”, declaró este sábado el portavoz del Vaticano Federico Lombardi.

“Es la hora de la verdad, de la transparencia y de la credibilidad”, subrayó durante una conferencia sobre la comunicación en la era digital, organizada por la Iglesia católica.

“El secreto y la discreción no son valores que hagan un favor a la mayoría. Debemos estar en posición de decir que no tenemos nada que esconder”, afirmó, citado por las agencias de prensa italianas.

Esta semana el papa Benedicto XVI aceptó la dimisión de dos obispos implicados en casos de pedofilia.

El belga Roger Vangheluwe reconoció haber abusado de un menor hace varios años. Es el primer obispo que dimite por haber cometido él mismo abusos sexuales a menores desde la oleada de escándalos que sacude a la Iglesia en Europa y en América desde noviembre.

Y James Moriarty es el cuarto obispo que presentó su dimisión tras dos escándalos en Irlanda.

Importantes dignatarios de la Iglesia están acusados de haber protegido a sacerdotes que presuntamente realizaron abusos sexuales, enviándolos a otras parroquias o bien en ocasiones cometiendo ellos mismos los delitos, en vez de delatarlos a la justicia.

La presunta víctima de un sacerdote acusado de haber abusado de casi 200 niños en una escuela de sordos de Wisconsin (Estados Unidos) interpuso una querella el jueves contra el Vaticano y el Papa para pedir la publicación de los expedientes secretos sobre las investigaciones internas de la Iglesia católica sobre los casos de pedofilia.