Debido al virtual empate en que quedará la Cámara de Diputados entre los 2 principales bloques, cuando asuman los nuevos parlamentarios el próximo 11 de marzo, los escaños de los independientes y del Partido Regionalista de los Independientes (PRI), se volvieron indispensables para tener el control de la Cámara.
Imagen: Cambio21.cl
Con el recambio de figuras, a partir del 11 de marzo, en total serán 54 los diputados de la Concertación, que sumados a los del Partido Comunista completan 57 representantes; mientras que la Coalición por el Cambio tendrá 58 diputados. Es por ese guarismo que los 2 independientes y 3 del PRI toman un rol fundamental.
Aunque tras la batahola que se desató al interior de la Concertación, el Partido Radical echó pie atrás al acuerdo suscrito con la UDI, RN y el PRI, a la Coalición por el Cambio le bastan los 3 diputados del PRI para tomar control de la mesa de la Cámara.
El presidente de RN, Carlos Larraín, tras compartir un café con su par del PRI, Adolfo Zaldívar, destacó el acuerdo alcanzado en la Cámara y no escondió su interés porque el PRI se transforme en un partido oficialista durante el mandato de Sebastián Piñera.
Adolfo Zaldívar, al ser consultado acerca de la posibilidad de asumir algún Ministerio en el gobierno de Piñera, dado que su período senatorial culmina el 11 de marzo, evitó dar una respuesta tajante.
Y si bien Adolfo Zaldívar ha mostrado una simpatía creciente por Sebastián Piñera desde que pasó a la segunda vuelta de la elección presidencial, al interior del PRI no existe ese consenso, porque otros personeros de la tienda mantienen diferencias con el Presidente electo.
Incluso el propio senador Zaldívar hace sólo un año dijo que “el candidato de la Alianza es la mejor expresión de la concentración de riqueza y de la especulación que tiene de cabeza a todo el mundo, no está en condiciones de garantizar una conducta acorde a lo que Chile necesita”, y en otra ocasión planteó que “debería estar demente para apoyar a la derecha”.
