Una anciana de 84 años y un hombre de 22 fueron rescatados con vida entre los escombros de Puerto Príncipe esta jornada en Haití, a 10 días del devastador terremoto que asoló la nación caribeña.

La haitiana fue de entre las ruinas de su casa de Puerto Príncipe por amigos el viernes, indicaron a la AFP su hijo y los médicos que la tratan en el hospital.

“Estoy tratando de ver cómo puedo ayudarla a sobrevivir. Tiene el pecho aplastado y muchos gusanos”, indicó Ernest Benjamin, socorrista que llegó a Haití desde el Centro Médico Monte Sinaí de Nueva York.

“Vale la pena intentar todo para salvarla”, añadió.

Marie Carida Roman, de 84 años, fue internada en el abarrotado General Hospital de la capital haitiana, con suero intravenoso y máscara de oxígeno.

“Cuando la trajeron no se movía. Ahora su mandíbula tiene movimiento. Estaba completamente deshidratada”, explicó el doctor Vladimir Laroche del Hospital Coler-Goldwater Specialty, también de Nueva York.

El hijo de Roman, un técnico de teléfonos de 58 años que rehusó dar su nombre, dijo: “La escuché llamando ayer (jueves) cerca de las 9:00 ó las 10:00 de la mañana. Amigos del barrio ayudaron a desenterrarla, tan sólo con nuestras manos”.

“La sacamos esta mañana cerca de las 7:00″ del viernes, añadió.

En tanto, un hombre de 22 años fue rescatado también con vida de entre los escombros de un edificio de Puerto Príncipe, anunció en un comunicado un equipo de socorristas del ejército israelí.

El hombre, cuyo nombre no fue revelado, fue inmediatamente transferido a un hospital de campaña de las fuerzas israelíes en Haití.

La víctima fue extraida de los escombros de un edificio cercano al Palacio Presidencial y se encontraba en estado estable, según el comunicado.

Médicos estadounidenses y franceses habían intentado anteriormente en vano extraer a la víctima de entre los escombros.

“Ellos recurrieron a los equipos de socorristas israelíes que tuvieron éxito en rescatarlo tras una media hora de trabajo en un túnel de alrededor de 2,5 a 3 metros de largo, a salvo y con buena salud”, explicó el comandante israelí Zohar Moshe.