“Creo que el negro está siendo el mejor alumno del blanco: Bush”, declaró el presidente boliviano, Evo Morales, sobre su par estadounidense, Barack Obama, y su predecesor, George W. Bush, en una entrevista al diario español El Mundo este lunes.
“A esa conclusión llego después de los meses que Obama lleva como presidente”, agregó Morales al hablar sobre Estados Unidos tras ser interrogado por el toque de atención dado por la secretaria norteamericana de Estado, Hillary Clinton, al gobierno boliviano por mantener relaciones con el gobierno de Irán.
“No vamos a permitir paternalismos de ningún país del mundo. Se acabaron las actitudes de carácter colonial, por lo menos mientras yo sea presidente. Hillary Clinton se equivoca al advertirme, amenazarme, sacarme una tarjeta amarilla… Y ahora, con más fuerza, vamos a seguir teniendo relaciones con los países revolucionarios y antiimperialistas”, alegó, respondiendo a la recriminación de Clinton.
“Nuestros pueblos, históricamente, lucharon contra el antiimperialismo (…) no estamos en esos tiempos. Y por eso no acepto ni voy a permitir que se ejerza esta clase de control”, advirtió.
Morales dijo “lamentar” que Obama “se esté desgastando en tan corto tiempo”.
“Yo podría darle clases de cómo mejorar su imagen y eso es trabajando por la igualdad, por la vida de nuestos países. Es lamentable que un hermano negro, con sus padres discriminados, igual que el movimiento indígena, haga esta política”, ahondó.
“A ver si los indios y los negros nos unimos para resolver los problemas estructurales. Pero creo que el negro está siendo el mejor alumno del blanco: Bush”, concluyó.
Sobre las conclusiones de la cumbre del clima de Copenhague y los fondos que los países ricos destinarán a los menos desarrollados para ayudarles a hacer frente al cambio climático, Morales calificó ese resultado como “una ofensa, una vergüenza para los países con industrialización irracional”.
“La deuda ecológica, la deuda climática no tiene precio. El mejor precio es que hay que cambiar el capitalismo, los modelos económicos vigentes, que sólo buscan el consumismo, el lujo, y no hay políticas sociales que permitan acabar con la pobreza. Por eso es condenable esa propuesta. No reparan ningún daño, ni a un ser humano”, defendió.