Acompañado del alcalde de Cerro Navia, Luis Plaza llegó hasta el Instituto Traumatológico un hombre de 41 años que sufre de paraplejia y unas gigantescas escaras para exigir atención de urgencia y evitar que lo derivaran nuevamente.
Carlos Sánchez, de 41 años, sufre fuertes dolores todos los días desde abril de 2001 cuando fue asaltado y e impactado por una bala en su pulmón la cual comprometió su columna y, finalmente, lo dejo paraplejico para siempre.
Desde esa fecha ha recibido atención en los hospitales San Juan de Dios, Félix Bulnes y últimamente en el Instituto Traumatológico hasta donde llegó a exigir una atención permanente y no más derivaciones ni dadas de alta.
Esto porque el estar inmovilizado le provocó una gigantestas escaras que dejan a la vista sus huesos y que según él en más de dos ocasiones le han provocado una septicemia, una infección tan grave que podría haberlo matado.
En su demanda lo acompañó el alcalde de Cerro Navia, Luis Plaza, quien aseguró que el martes 25 de septiembre del año 2001 la Corte de Apelaciones en un fallo unánime ordenó al Ministerio de Salud a otorgarle atención preferente y gratuita.
Frente a esta acusación el director del instituto, Mario Reyes, explicó que a Sánchez nunca se le negó el tratamiento pero que la última vez que acudió al servicio de urgencia lo hizo sólo por la tendinitis que tiene en el hombro y no mencionó el problema con sus escaras.
Además, aseguró que a penas volvió fue atendido y examinado por el cirujano plástico Jorge Villegas, quien decidió hospitalizarlo para examinar la evolución de sus escaras e intentar detectar el origen de la tendinitis que afecta su hombro.