La dietista y autora del libro "¿Por qué me duele la regla?", habló con BioBioChile sobre las claves de la dieta antiinflamatoria y el rol que juegan los alimentos a la hora de tratar los síntomas de la endometriosis.

La endometriosis es una de las enfermedades que afecta de manera cada vez más frecuente a mujeres y adolescentes desde temprana edad. La afección que tiene como principal síntoma el dolor invalidante, usualmente puede pasar desapercibido, sin embargo, sus efectos a largo plazo pueden llegar a ser irreversibles.

A comienzos de este año, la hija del empresario chileno Leonardo Farkas, Tatiana, reveló en su cuenta de Instagram que sufría de endometriosis, enfermedad que en ocasiones le causa “no querer vivir”, debido a lo dolorosa que puede llegar a ser, y es que según la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU, este suele ser el principal síntoma.

“Los cólicos o el dolor en la parte abdominal inferior puede empezar una o dos semanas antes de la menstruación. Los cólicos pueden ser permanentes y el dolor puede ser sordo a muy fuerte“, detallan en su sitio web.

Así como la escritora, la dietista Elena Serrano del Pozo, autora de “¿Por qué me duele tanto la regla?”, reveló a través de su experiencia cómo ha combatido los síntomas de la enfermedad utilizando una dieta antiinflamatoria que, a su juicio, se ha convertido en una técnica clave.

Claves de la dieta antiinflamatoria para la endometriosis

En conversación con BioBioChile la profesional afirmó que la primera clave para aliviar los síntomas de la enfermedad es descubrir cuál es la mejor dieta antiinflamatoria para cada paciente.

“Existen muchas dietas que pueden ser adecuadas para el tratamiento de la endometriosis. Por norma general, estas dietas deben estar libres de productos ultraprocesados y de alimentos inflamatorios como el gluten, los lácteos o el azúcar“, afirma.

A lo que agrega: “También es importante que estas dietas reduzcan el impacto glucémico de la alimentación; mantener niveles estables de glucosa, es una parte importante del tratamiento. La dieta debe ser rica en vegetales, pero también en proteínas y grasas de calidad“.

Con esto como base, la dietista y paciente de endometriosis, recomienda una “dieta antiinflamatoria que puede estar configurada según el gusto de cada una, ahí es importante la labor de un nutricionista especializado en endometriosis. Pero otras dietas como la cetogénica o la paleo podrían ser interesantes. Aun así, deberán estar bien planteadas y supervisadas”, advierte.

¿Qué alimentos producen inflamación?

La segunda clave que detalla la autora es el aprender a reconocer aquellos alimentos que producen inflamación y que por ende exacerban los síntomas de la endometriosis.

El lograr identificarlos va a depender de la dieta individual, pues “cada persona tiene mejor o peor tolerancia a ciertos alimentos”, afirma.

No obstante, independiente a esto, existe una cantidad de alimentos que producen inflamación en la mayoría de los pacientes, como lo es el gluten o los aceites vegetales refinados, los lácteos, alimentos ricos en azúcares o almidones, además de cualquier alimento ultraprocesado como bollería, galletas, helados, aperitivos salados, etc.

La autora afirma que cambiar la alimentación de las pacientes de endometriosis a una dieta antiinflamatoria definitivamente hará un cambio y producirá “una mejoría en mayor o menor grado”, no obstante, advierte: “Esto no quiere decir que cambiando la alimentación se vayan a solucionar todos los síntomas (…) En algunas pacientes esa mejoría es notoria, pudiendo incluso desaparecer por completo el dolor y otros síntomas como el cansancio. Pero en otras pacientes, la mejoría puede ser algo menor, puede que vean reducida la cantidad de dolor que sienten, pero ese dolor y otros síntomas pueden persistir. En estos casos es interesante combinar la alimentación con cualquier otra técnica que nos pueda ayudar”.

Incluir terapias alternativas

Sobre estas últimas, Elena recomienda que otra clave para aliviar los síntomas de la endometriosis, además de cambiar la alimentación, es acudir a terapia psicológica, esto con el fin de controlar el “estrés, la depresión y la ansiedad, pues todos los síntomas de la endometriosis, por lo que es de vital importancia conocerse a una misma, identificar los momentos de estrés y saber atajarlos”, asegura.

A lo que agrega: “Por otro lado, la fisioterapia y osteopatia visceral ayudan a frenar el avance de la endometriosis, mejora los síntomas y reduce el dolor que padecemos. Seguido de esta técnica, la actividad física es una de las actividades más antiinflamatorias que nuestro cuerpo necesita, es otro imprescindible del tratamiento de la endometriosis, siempre aplicada a las capacidades de cada una”, asegura.

Sumado a estas, la dietista recomendó usar “medicina tradicional china, la meditación y el mindfulness, el drenaje linfático o la fitoterapia”, todo esto conjugado con el tratamiento médico.