Unos 30 millones de estudiantes mexicanos iniciaron este lunes un nuevo ciclo escolar con clases por televisión debido a la pandemia del nuevo coronavirus, que según expertos impacta su salud mental y la calidad de la educación.

Se trata de alumnos de educación básica y secundaria de 4 a 18 años, inscritos en el sector público, que seguirán su aprendizaje bajo este formato hasta que haya condiciones para volver a las aulas.

Las escuelas privadas también deberán funcionar con clases a distancia, como venía ocurriendo desde el pasado 17 de marzo, cuando se suspendieron las actividades presenciales.

El nuevo período finalizará el 9 de julio de 2021

“A pesar de la pandemia, del dolor, del sufrimiento que ha causado, que desgraciadamente sigue causando, estamos (…) de pie”, dijo este lunes el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, al declarar abierto el ciclo.

México, de 128,8 millones de habitantes, acumula 60.480 muertes por la covid-19, lo que lo convierte en el tercer país más enlutado después de Estados Unidos y Brasil. También contabiliza 560.164 casos confirmados.

El plan “Aprende en Casa” adoptó la televisión porque su cobertura es de 94%, frente a 70% u 80% de internet, según el gobierno, que se alió con cuatro televisoras privadas y entrega libros gratuitos.

Las clases se impartirán por señal abierta y servicios de cable, aunque los profesores también podrán organizar sesiones por videollamada, explicó este lunes el secretario de Educación, Esteban Moctezuma.

De acuerdo con el funcionario, los contenidos también estarán disponibles en 22 lenguas indígenas, y en zonas alejadas se difundirán igualmente por la radio.

El currículo incorporó una materia de salud, pues México ocupa el primer lugar en obesidad infantil.

Además, 25% de los fallecidos por el virus padecía esa condición y tres cuartas partes tenía al menos una comorbilidad asociada a la mala alimentación.

La estrategia educativa incluye además 160 líneas telefónicas de apoyo pedagógico.

El encierro y el deterioro de la economía familiar están pasando factura a los menores.