El pasado 3 de febrero se conoció que Donald Trump buscará cerrar el programa USAID, que ayuda a millones de personas en el mundo ¿De qué se trata y cuáles serían los efectos?
La decisión del mandatario está fundada en que, desde su perspectiva, la agencia de desarrollo está provocando un despilfarro de recursos. De hecho, en la plataforma “Truth Social”, Trump aseguró que “miles de millones de dólares han sido robados de USAID”, sin aportar pruebas de su afirmación.
Ese mismo 3 de febrero, el magnate Elon Musk, quien ahora se desempeña liderando el nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), fue quien anunció que USAID sería cerrado. Sin embargo, el pasado viernes 7, el juez Carl Nichols emitió una orden para frenar que se aplicara la medida de licencia pagada a 2.200 trabajadores.
La acción hizo que estos y otros 500 funcionarios volvieran a sus puestos de trabajo, no obstante, la vigencia solo es hasta el 14 de febrero, consigna BBC News.
¿Qué es USAID?
USAID es una sigla en inglés que representa a la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, la cual es responsable de brindar ayuda humanitaria en el mundo.
Según el mismo medio, la organización fue fundada en 1961 y se dedica a financiar programas de ayuda, que entregan alimentos, vacunas, e incluso opera el sistema de detección de hambrunas que predice en qué lugares se produciría una escasez de alimentos.
Se estima que USAID da trabajo a unas 10 mil personas y que dos tercios de ellas operan desde el extranjero. Además, pese a que tiene bases en más de 60 naciones, entrega ayuda en unos 130 países.
De acuerdo a cifras de 2023, Estados Unidos destinó 68.000 millones de dólares al programa, de los cuales, 40 millones, están ligados directamente a la ayuda internacional; el resto se distribuiría en departamentos y agencias.
A partir de estas cifras es que, según afirma la BBC, el país liderado por Donald Trump es el que más gasta en desarrollo internacional.
¿Qué está en riesgo al poner fin al programa?
Aunque una buena parte de los recursos de USAID se gastan en Asia, África subsahariana y Europa, en Latinoamérica también hay proyectos financiados por la agencia.
En 2024 aportó a la región 2.300 millones de dólares, representando un pilar fundamental para diversos programas.
Colombia es uno de los países que se benefician de estos recursos. El año pasado se destinaron casi 400 millones de dólares a programas humanitarios, cooperación judicial, seguridad, educación, sanidad, paz, igualdad, medioambiente, cultura y migración.
La gestión migratoria sería otra de las iniciativas financiadas por USAID en la región. Stephani López, consultora en políticas migratorias, advierte que la reducción de fondos “impacta directamente a entidades como Migración Colombia y al programa de migrantes y refugiados del Departamento de Estado”, lo que limita la capacidad operativa en zonas clave como las fronteras con Venezuela y Ecuador.
En Honduras, que recibió unos 100 millones de dólares en 2024, “las víctimas de desplazamiento forzado interno” serían las principales afectadas por un eventual cierre de USAID, comentó a Agencia EFE la coordinadora de la Defensoría de Movilidad Humana del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos en ese país, Elsy Reyes.
Según Reyes, entre los sectores en condición de vulnerabilidad afectados estarían los niños, las mujeres, personas migrantes retornadas y grupos de la comunidad LGTBIQ+.
Cabe señalar que en Chile los aportes de USAID serían los más bajos de la región, con apenas unos 0,3 millones de dólares en 2023, consigna Emol. Por su parte, el medio Ex-Ante, afirma que los últimos años, estos recursos se han destinado a proyectos la Universidad Católica, la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) y Caritas Chile.
En Asia, y más concretamente, en Bangladés, el país norteamericano concedió 393 millones de dólares en ayudas durante 2024. El director de ADAB, una asociación de agencias de desarrollo de ese país, Abul Kalam Mohammad Jashim Uddin, afirmó que “Estados Unidos nos ha apoyado económicamente desde el comienzo de nuestra independencia, en 1971”.
Según él, la cancelación de la ayuda estadounidense está causando graves problemas al país. Miles de empleados de proyectos ya han sido despedidos. “Debilitará a la sociedad civil de Bangladés. Podría provocar inestabilidad social, mayores riesgos sanitarios y más pobreza. Todo esto se intensificará”, advierte.
En tanto, en otras partes del mundo, el programa proporciona prótesis a los soldados heridos en Ucrania y ayuda a desactivar minas terrestres. En materia de salud, ayuda a contener la propagación del ébola en África, pero también brinda medicamentos y agua potable en otras latitudes.