Muchas personas dejan su televisor encendido o un ruido de fondo para conciliar el sueño. Aunque puede ayudar a dormir, con el tiempo podría causar problemas de salud mucho más complejos.

Al llegar la hora de dormir hay personas que pueden conciliar el sueño fácilmente, sin embargo, hay algunos que no y necesitan tener el televisor encendido o un ruido de fondo para conseguirlo.

El ser humano está diseñado para dormir a oscuras y en completo silencio, pero hay quienes por hábito o costumbre acuden a tener un sonido de fondo para lograr cerrar los ojos y descansar. Además, poco se conoce sobre los riesgos que conlleva.

En esta línea, el Instituto Europeo del Sueño indica que los ruidos emitidos por el televisor provocan que el cerebro “aumente su actividad eléctrica y las neuronas comiencen a acelerarse”, lo cual puede ser contraproducente a la hora de dormir.

Según el Dr. Facundo Nazar, médico general con formación en neurología de Clínica Los Carrera, este sonido es conocido como un “ruido blanco”, es decir, “un ruido que no debería alterarnos y es el que nos permite solapar otros sonidos que generan malestar durante el sueño como el tráfico, gritos de vecinos o ronquidos”.

¿Por qué sucede?

Dormir puede ser bastante complejo, sobre todo cuando el cerebro sigue activo y se requiere poner el foco de atención en el exterior en vez del interior. Por ello, hay personas que optan por tener un sonido externo (o ruido blanco) para relajar el cuerpo y evitar pensamientos intrusivos a la hora de conciliar el sueño.

A este fenómeno se le llama “rumiación mental” y sucede cuando las personas “se quedan pensando en aquello que les faltó hacer o en lo que fallaron durante el día”, comenta el doctor Nazar, “de alguna manera, estar escuchando una conversación en una serie o película les evita que tengan estas ideas”.

Al concentrarse en bloquear los sonidos provenientes del exterior, el cerebro no se enfoca en los pensamientos internos o preocupaciones personales y ayudar a que el individuo se quede dormido.

Por otra parte, este ruido blanco “habitualmente tiene una gama de sonidos bastante amplia que trabajan como un bloqueo o una pared a todos los sonidos ambientales que pueden despertar a las personas con un sueño liviano”, puntualizó la Dra. Berta Altamirano, médico general en formación en neurología de Clínica Los Carrera.

Según la profesional, como abarcan diferentes gamas, las frecuencias suben y bajan en diferentes tonos y hace que los sonidos del ambiente no actúen como un despertador natural, “porque nuestro cerebro se acostumbre a que este estímulo continuo no sea una alerta de activación”.

Los riesgos de dormir con el televisor encendido o un ruido de fondo

Aunque este método puede funcionar, con el paso del tiempo dormir con la televisión prendida o con otros estímulos en el ambiente podría ser perjudicial para la salud, debido a que el cuerpo sigue activo y no descansa en su totalidad.

Una de las más perjudicadas con este hábito son las células ciliadas, las encargadas de captar las altas frecuencias del ambiente y que cumplen un rol clave en la capacidad auditiva.

“Mantener sometidas estas células toda la noche no es natural, ya que nuestro organismo necesita de un reposo para desarrollar mecanismos de reparación”, sostiene la doctora Altamirano.

Y agrega: “Con la edad las células ciliadas se verían afectadas si seguimos sometiendo nuestros oídos al ruido blanco para conciliar el sueño, pues estarían continuamente activas, lo cual genera un desgaste”.

Otro de los riesgos a los que se expone una persona que duerme con el televisor encendido está relacionado con la luz azul que emiten las pantallas, ya que una exposición prolongada pueden ser nocivo para la salud.

En este sentido, Dr. Facundo Nazar sostiene que la luz de estos aparatos puede perjudicar hormonalmente a las personas, afectando principalmente a la producción de melatonina, y generar micro despertares que impiden que se entre en una fase profunda de sueño.

Asimismo, puede provocar “somnolencia al día siguiente, fatiga, trastorno del humor, apatía y tensión. A largo plazo, esto conlleva a la predisposición de enfermedades como la hipertensión arterial o patologías cardiovasculares“, acotó el especialista de Clínica Los Carrera.

Recomendaciones para dormir correctamente

Para poder conciliar el sueño y dormir placidamente durante toda la noche, es importante tener en consideración algunos hábitos que pueden afectar la higiene del sueño y adoptar cambios para mejorar el descanso nocturno.

En este sentido, el doctor Nazar dice que “muchos de los problemas se pueden solucionar sin la necesidad de fármacos y enfocarlo más en la higiene del sueño, es decir, prácticas que ayudan a corregir estos hábitos y dormir mejor”.

Lo primero es tener un ambiente adecuado para pernoctar durante la noche, esto implica contar con un lugar cómodo, una habitación con poca iluminación y aislada del ruido ambiental (tráfico, ruido de los vecinos, entre otros).

También, se aconseja acostarse solo cuando realmente se necesita, es decir, dormir solamente cuando el cuerpo esté preparado para descansar. Asimismo, durante el día, se tiene que mantener un estilo de saludable, esto incluye, hacer ejercicio y comer sano.

En caso de no poder dormir, el Instituto Europeo del Sueño recomienda “leer un libro o escuchar música relajante previo al sueño, para bajar la intensidad de la actividad cerebral y procurar un mejor descanso”.

Si ninguno de estos cambios funcionar, es aconsejable acudir a un especialista médico para identificar el origen de la situación y tratar los problemas vinculados con el sueño o el mal dormir.