La Federación Nacional de Remolacheros aseguró que la empresa Iansa cumplió los compromisos asumidos con los productores, por el cierre de su planta en Los Ángeles. Hoy trabajan en Chillán, lo que genera costos por transporte de fletes y peajes, que son asumidos por la histórica empresa azucarera.

El presidente de la Federación Nacional de Remolacheros (Fenare), Jorge Guzmán, afirmó la mañana de este martes que la empresa Iansa cumplió los compromisos asumidos con los productores de la zona, tras el cierre de su planta en Los Ángeles, a fines de septiembre de 2020.

El dirigente angelino reconoció que, tal como lo señaló la industria, a los agricultores que entregaban la remolacha en esta ciudad y que hoy lo hacen en Chillán, les están pagando la diferencia de flete, incluyendo el peaje en su totalidad.

Jorge Guzmán también expresó las expectativas respecto a la próxima temporada, considerando la competencia con otros cultivos tradicionales y el precio internacional del azúcar.

Durante la temporada pasada en la provincia de Bío Bío, se sembraron 2 mil 450 hectáreas con remolacha, de las 2 mil 800 proyectadas, equivalente a un decrecimiento del 12,5%.

Por su parte, la empresa informó que con el cierre de sus plantas en Los Ángeles y Linares, bajaron de 12 mil a 9 mil hectáreas.

En relación a los 121 trabajadores de la planta en la capital de la provincia de Bío Bío, la compañía había anunciado su reubicación para una parte de ellos y los demás se acogerán a un plan de despido.