Por 5 meses un joven ha vivido con una bala alojada en su pierna, la que llegó ahí en medio de un asalto que sufrió.

En ese sentido, está esperando a ser operado para poder retirarla, ya que los dolores se estarían tornando cada vez más intensos.

Fue el 5 junio de este año que el joven de 19 años sufrió el robo del vehículo que su madre le había facilitado para trasladarse a su trabajo. Aquella noche, fue apuntado con un arma, recibiendo un disparo en su pierna izquierda.

Horas después se recuperó el automóvil, pero aún así las consecuencias se extendieron hasta la actualidad, ya que la bala quedó alojada en su cuerpo, teniendo que pasar por diferentes tratamientos para reducir los dolores.

La madre del afectado, que prefirió resguardar su identidad, comentó a Radio Bío Bío que acudieron a un kinesiólogo, quien le habría realizado algunas pruebas, dando cuenta de su condición.

La mujer afirmó que los médicos en los recintos asistenciales públicos que han atendido a su hijo, le habrían indicado que puede vivir de esta manera, por lo que no se ha presionado para operarlo, cotizando ella el procedimiento que bordea los 800 mil pesos de manera particular.

Sin embargo, desde el Hospital de Los Ángeles indicaron que el Cesfam correspondiente al usuario ya solicitó una interconsulta para cirujano, la que estaba programada para octubre, aunque debido a la pandemia se ha generado un retraso.

Del mismo modo, reconocieron que producto del covid-19 se hizo una reprogramación en los pabellones, lo que ha significado que las intervenciones se hayan ido aplazando este año, por lo que eventualmente el joven pudiese prontamente recibir una operación que finalmente le retire de su pierna la bala con la que ha tenido que vivir por casi 5 meses.