Hace dos semanas, la Subsecretaría de Redes Asistenciales autorizó el reprocesamiento o desinfección de las mascarillas N95, para que el personal de la salud pueda reutilizarlas y así protegerse del contagio del coronavirus ante un “posible desabastecimiento”.

Se trata de la circular N°5 de esa división, que autoriza la reutilización de ese tipo específico desde el 29 de abril, lo cual ha generado preocupación en funcionarios de salud.

La instrucción se basa en las recomendaciones que entregó la FDA (Agencia de Medicamentos y Alimentación, por sus siglas en inglés) en Estados Unidos, que permite someter las mascarillas a un proceso de desinfección con vapor o plasma de peróxido de hidrógeno, por lo que se determinó adaptar estas sugerencias para que sean aplicadas en los establecimientos de salud de nuestro país.

Esto preocupa al Colegio de Enfermeras de la región del Bío Bío. La primera directora del gremio, Priscilla Inostroza, indicó que el protocolo permite reprocesar hasta tres veces la mascarilla N95, indicando que no hay evidencia científica sobre la efectividad de los filtros tras ser sometidas a esta desinfección.

La circular establece que las mascarillas podrán ser reutilizadas en el caso que no se cuente con un stock para 30 días o menos, como también cuando no se puede dar seguridad al equipo de salud y la continuidad de atención.

En este sentido, Inostroza señaló que en la región no se están reprocesando respiradores del tipo N95, y que en caso que esto ocurra, primero se debe dar aviso a las autoridades de salud.

Entre otras cosas, la circular establece que las mascarillas deberán ser identificadas con el nombre del funcionario que la está utilizando, para luego ser sometida al proceso de desinfección.

Una vez que finaliza esta etapa, los respiradores deberán ser marcados para identificar que ya han sido reprocesados para que nuevamente puedan ser ocupados en la atención de pacientes positivos de Covid-19.