“No tiene perdón de Dios”, fueron las palabras que utilizó la alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato, para referirse a las cinco denuncias por presunto abuso sexual infantil que involucran a la jefa de UTP de la escuela de lenguaje Acuarela.

De acuerdo a los antecedentes, los hechos habrían ocurrido en la oficina de fonoaudiología del establecimiento. Según el relato de los familiares de los niños de al menos 4 años, sería en ese lugar donde habrían sido víctimas de tocaciones y también de sexo oral.

Al respecto, la jefa comunal dijo que es una situación que “no tiene nombre” y que tampoco tiene “perdón de dios”, indicando que son hechos que no pueden volver a suceder.

“Esto no tienen nombre, yo creo que esto no se justifica y esto no tiene perdón de Dios porque son niños que van a aprender, que van a estudiar, sentenció Reginato.

La gobernadora de Valparaíso, María de los Ángeles de la Paz, dijo que si bien se trata de un tema que está en investigación, considerarán todas las coordinaciones necesarias para que se haga justicia.

“Lo importante es que, tanto la Seremi de Educación como otras entidades, han tomado todas las acciones necesarias para llegar oportunamente a agotar todos los medios de investigación dado que está todavía en proceso de recopilación de antecedentes”, señaló.

En Fiscalía ya hay una causa en curso, con al menos cinco denuncias por presunto abuso sexual infantil, y los apoderados no descartan que existan más casos de abuso a niños y niñas de tan solo 4 años de edad.

Dentro de la denuncia también se buscará establecer si los niños habrían sido o no fotografiados desnudos.

En tanto, desde la Superintendencia de Educación informaron que al conocer la situación se presentaron en el establecimiento, pero se encontraba cerrado. Por ello, oficiaron para que la escuela entregue los antecedentes y cómo procedió ante lo ocurrido.

Este artículo describe un proceso judicial en curso
Existe la posibilidad de que los cargos sean desestimados al finalizar la investigación, por lo cual NO se debe considerar al o los imputados como culpables hasta que la Justicia dicte sentencia en su contra.
(Artículo 04 del Código Procesal Penal)