La Justicia impuso 1.300 días de presidio a un hombre que agredió con un vidrio a funcionarios policiales, tras ser condenado por dos delitos de maltrato de obra y amenazas a Carabineros en ejercicio de sus funciones. La pena será cumplida de manera efectiva en el Complejo Penitenciario de Punta Arenas.
A casi tres años y medio de cárcel fue sentenciado un hombre que amenazó y agredió a dos carabineros durante un procedimiento policial efectuado en Río Seco.
El Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas resolvió que la pena sea cumplida de manera efectiva en un recinto penitenciario.
Los jueces dieron por acreditados los hechos ocurridos el 12 de octubre del 2020, donde en horas de la tarde, Carabineros concurrió al sector Calafate, a 15 kilómetros al norte de Punta Arenas.
Lo anterior, tras haber sido alertados por vecinos sobre el ingreso no autorizado de un vehículo a una parcela.
Condenado agredió con un vidrio a Carabineros
El denunciado era Luis Vega Mella, quien se encontraba al interior del predio cuando llegaron los funcionarios policiales.
“Ah, no me ‘pidai’ ni una w…”, les dijo tras ser fiscalizado. Luego reaccionó con patadas y puñetazos contra los efectivos.
El acusado dobló las manos de un cabo segundo y mordió su meñique izquierdo. Después rompió el vidrio de una ventana y lanzó cortes al personal policial, mientras los amenazaba de muerte.
Como no pudieron dominarlo, los funcionarios debieron salir del lugar, pero a un sargento se le cayó el terciado de su armamento.
Una vez que se agachó, el condenado le propinó un corte en su nuca que lo dejó con un profuso sangrado, según publicó Diario El Pingüino.
Finalmente, el sargento resultó con una herida cortante occipital y una mano lesionada. Mientras que el cabo segundo quedó con una esguince pulgar y escoriaciones en su mano.
El sujeto, en tanto, fue al fin detenido por otros funcionarios policiales.
Sujeto fue condenado a 3 años y medio de cárcel
Vega Mella fue condenado por dos delitos de maltrato de obra y por amenazas a funcionarios de Carabineros en ejercicio de sus funciones. Los ilícitos se pudieron acreditar a partir del testimonio de los efectivos y las pericias que constaban sus lesiones.
El acusado también enfrentó cargos por violación de morada. Sin embargo, el tribunal lo absolvió porque no se pudo acreditar que el predio donde fue descubierto estaba destinado a la ocupación de terceras personas.
Los jueces resolvieron que la pena de 1.300 días de cárcel se cumpla de manera efectiva por los antecedentes penales del acusado, quien registra más de 10 condenas en su extracto de filiciación, incluyendo dos por maltrato de obras.
“Atenida la existencia de causas penales anteriores, el acusado no se encuentra habilitado para cumplir la pena con alguna de las penas sustitutivas”, resolvió el tribunal.
De todos modos, se le abonan los casi 17 meses que ha cumplido con arresto domiciliario total.
