Un hombre fue condenado a 7 años de cárcel tras robar e incendiar una iglesia en Punta Arenas. Entre las especies sustraídas se incluyen dos equipos de música, un cáliz de bronce, cuadros de pintura y hasta una sotana. El tribunal dio por acreditada la intencionalidad del incendio para borrar cualquier tipo de evidencia del primer delito.

El Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas condenó a Alberto Quezada Muñoz a más de siete años de cárcel por robar especies e incendiar la capilla Nuestra Señora del Carmen, ubicada en la localidad de Río Seco.

Los hechos ocurrieron el 31 de diciembre del 2020. Durante la mañana, el sujeto ingresó a la iglesia por una ventana y sustrajo dos equipos musicales, un cáliz de bronce, cuadros de pintura e incluso una sotana. Posteriormente, ocultó las especies -avaluadas en 300 mil pesos- al interior de una camioneta.

Después, el condenado regresó a la parte central de la capilla y prendió fuego a papeles y cartones apilados en el suelo. El incendio se propagó a otras dependencias y arrasó con la mayor parte de la estructura interior, que estaba construida de madera.

El siniestro fue advertido por lugareños, quienes advirtieron a Bomberos del rápido avance del fuego. Sin embargo, la capilla quedó reducida a escombros, generando pérdidas que alcanzan los 300 millones de pesos.

Robo y quema de iglesia: acreditan intencionalidad de incendio

Durante el juicio comparecieron funcionarios de Carabineros, voluntarios de Bomberos y vecinos de Río Seco. Aunque la defensa alegó que el incendio inició por una falla eléctrica durante el robo, la mayoría de los jueces dio por acreditada la intencionalidad.

“Para borrar todo tipo de evidencia de su intervención, (el acusado) procedió a aplicar fuego al interior del recinto, el que quedó destruido casi totalmente en la zona interior por la acción del fuego”, dice la sentencia.

El juez Julio Álvarez opinó que se debía absolver al acusado por el delito de incendio, considerando que no se incorporaron pruebas para concluir que el fuego se inició por el apilamiento de papeles y cartones.

Quezada Muñoz fue condenado a seis años de cárcel por incendio y otros 541 días por robo en lugar no habitado. La pena se pudo rebajar porque el tribunal reconoció la atenuante de colaboración con la justicia. Sin embargo, su extensión lo obliga a cumplirla de manera efectiva en el Complejo Penitenciario de Punta Arenas.

Finalmente, se dio a conocer que la defensa tiene 10 días para recurrir a la Corte de Apelaciones.