Si bien Chile ha experimentado un retroceso de contagios de covid-19 durante las últimas semanas, llegando a mínimos históricos en los niveles de positividad, hay comunas que no pueden despegar.
Es el caso de Panguipulli, en la región de Los Ríos, que ya lleva cerca de 100 días en cuarentena total y, hasta ayer, registraba 140 casos activos de coronavirus.
Germán Avendaño, presidente de la Cámara de Comercio de la localidad, asegura que el panorama es desalentador y que una gran cantidad de locales ha debido cerrar sus puertas por el confinamiento.
“El comercio se ha resentido de forma increíble. Hay rubros que sí han podido trabajar, pero hay rubros que no lo pueden hacer. El sector gastronómico, hotelería, peluquerías y gimnasios ven cómo el vecino sí puede trabajar, cómo la frutería trabaja, la ferretería trabaja, los almacenes trabajan”, señala.
Medidas con enfoque local
Asimismo, el timonel del gremio asegura que las medidas que ha adoptado el Gobierno no se condicen con la realidad local. “La Constitución tiene consagrado el trabajo para todos los ciudadanos. Lamentablemente, este Gobierno no ha querido escuchar y lo único que ha ofrecido en la región de Los Ríos es que la gastronomía trabaje en terrazas. En el sur de Chile es prácticamente imposible”, afirma.
En la misma línea, agrega que “eso pasa porque no conocen la realidad nuestra y no están en el territorio. Se toman decisiones centralistas en Santiago y ni siquiera el Gobierno Regional nos puede ayudar”.
Si bien Avendaño reconoce que han tenido ayuda por parte del Estado y que muchos comerciantes han podido optar a bonos, asevera que nadie sobrevive a una cuarentena de 115 días.
Mayor fiscalización
A pesar de que la comuna se encuentra en cuarentena total, Avendaño asegura que se ha visto un mayor número de personas en las calles.
“No hay control y es por lo mismo que estamos complicados. Aquí no hay cordones sanitarios y, aunque se han pedido, no se puede porque tenemos entendido que es a través de un Decreto Supremo”, sostiene.
Por esa razón, dice que “estamos pidiendo puntos de control, que se puedan controlar a la gente que para qué viene a Panguipulli si estamos en cuarentena. Estamos tremendamente complicados por una alta tasa de contagios”.
“La gente pide mucho ir a las temas. Tenemos el cordón termal más grande de Sudamérica y la gente sigue yendo, sigue llamando insistentemente en llegar a Panguipulli, pero lamentablemente se nos hace un flaco favor”, manifiesta el presidente de la Cámara del Comercio local.
Crisis turística y vacunación
“Tenemos un volcán cercano, tenemos termas, y no han podido funcionar. Es catastrófico lo que ha ocurrido en la comuna y no hay caso de que pasemos a Fase 2, estamos atrapados hace mucho rato”, dice.
“En el sector urbano ya se han ido 5 o 6 restaurantes, que han dedicado su vida a esto (…) Nos cierran, pero a la vez tenemos que pagar, y estamos atorados. Si la cuarentena continúa, va a ser la lápida de la gastronomía y la hotelería en la comuna de Panguipulli”, añade.
Sobre la crisis económica que viven los empresarios locales, Avendaño expresa que “el comercio tiene sus protocolos sanitarios, pero hay rubros que no han podido comprar ni un alcohol gel (…) La patente sigue vigente, las contribuciones, los arriendos, etc. Se hace insostenible la situación”.
Sobre la difícil situación sanitaria que atraviesa la comuna de Los Ríos, manifiesta que “Panguipulli tiene mucha ruralidad, entonces pasa que no llegamos con la vacuna porque la gente tiene miedo de venir al sector urbano a vacunarse por el tema del transporte público. Entonces, no estamos llegando a esas localidades rurales y ahí tenemos la alta tasa de incidencia”.
Por ello, comenta que se ha reunido con las autoridades para instalar una mesa social covid y definir nuevas medidas, como tener más centros de vacunación en localidades rurales.
