La baja cantidad de profesionales que atienden con convenio Fonasa. Ese es el reclamo que también existe en la comuna de Osorno, región de Los Lagos.

Un reclamo frecuente de las personas que se atienden por medio del sistema público de salud, es la baja disponibilidad de profesionales médicos que atienden con convenio Fonasa, panorama que se repite en Osorno, región de Los Lagos.

En lo concreto, el 2021 se produjo una baja considerable en la cantidad de profesionales que atienden con este convenio; renunciando 17 de ellos a atender con este seguro de salud.

En la actualidad, son cerca de 35 los médicos generales que atienden con Fonasa en Osorno; además de 9 los oftalmólogos y 4 dermatólogos.

Una de las especialidades más demandadas es pediatría, sin embargo, solo 3 pediatras atienden con este convenio en la ciudad, mismo número para ginecólogos.

En otras especialidades, hay 2 otorrinos, 2 neurólogos de adulto y uno pediátrico; y solo un psiquiatra infantojuvenil.

A su vez, no hay psiquiatras adulto, ni traumatólogos, ni geriatras ni urólogos que atiendan con convenio Fonasa en la ciudad; lo que hace muy privativo el acceso a estas consultas a quienes tienen como seguro de salud a Fonasa y no una isapre; y no pueden costear la atención particular.

Al respecto se refirió el presidente del Colegio Médico en Osorno, Francisco Horning, precisando que “en Chile existe una muy mala distribución de especialistas”.

El problema se da a nivel nacional según señala el facultativo, por el centralismo que existe en la formación de especialistas.

Si bien el financiamiento igualmente está presente, no es el principal factor que lleva a los médicos a no trabajar con convenio Fonasa, añadió.

El 70% de los especialistas de Osorno trabaja en el Hospital Base. Además, actualmente este centro asistencial no tiene pensionado.

Todo esto redunda en que actualmente las alternativas para los pacientes que tienen Fonasa en cuanto a atención es muy limitada.

Para quienes requieran atención de estos u otros especialistas la alternativa es la atención por ejemplo, por medio del Hospital Base San José, cuyas listas de espera se vieron aumentadas como secuela de la pandemia, alcanzando en la actualidad más de 12 mil atenciones pendientes, con un promedio de espera de 9 meses aproximadamente.

Como Colegio Médico, señalaron finalmente que la unión entre medicina pública y privada podría resolver en gran parte el problema, para lo cual se requiere diseñar las estrategias que lo hagan posible.