Al borde del colapso se encuentra el vertedero de Curaco en Osorno -región de Los Lagos-, que recibe basura de toda la provincia y que ahora sumarán los desechos de Río Negro, tras el incendio de sus dependencias.
Y pese a que hay un proyecto de relleno sanitario, la actual iniciativa se encuentra entrampada en litigios judiciales y sin mayores avances, por lo que desde la sociedad civil piden reconocer consultas ciudadanas y que se analice un nuevo proyecto en otro terreno.
Ello decantaría en que las siete comunas de la provincia utilicen el vertedero de Curaco, ubicado en la ruta U 400, a pocos kilómetros de cono urbano del sector de Rahue, y que cuenta con una vida útil con fecha limite hasta el 2022, por lo que se trabaja en un nuevo proyecto.
En tanto, desde la Corporación Rahue, Dinelly Ángulo, presidenta de la ONG, quien explicó que la actual problemática de la basura ha sido inconsulta con la ciudadanía, sobre todo con el sector de Rahue, por lo que buscan analizar nuevas propuestas que se alejen del radio urbano y que no afecten en la calidad de vida de los vecinos.
El presidente de la comisión de Medio Ambiente del Consejo Regional, Francisco Reyes, insistió en que a la fecha se debe reevaluar la iniciativa y en lo posible trabajar con un nuevo proyecto, otro recinto y con evaluación de impacto ambiental.
En tanto, el alcalde de Osorno, Jaime Bertín, dijo que siempre ha sido urgente poder avanzar en un nuevo relleno sanitario provincial, aunque lamentó que salgan voces que no contribuyen a avanzar en la iniciativa que es responsabilidad del Gobierno Regional, aclaró.
En efecto, el GORE definirá la actual situación del proyecto del relleno sanitario.
Recordemos que el 2014, la empresa Servitrans se adjudicó el contrato de construcción del nuevo relleno sanitario, en el transcurso de ese año se reportaron dificultades técnicas y una falla en el terreno, lo que llevó a paralizar las obras hace 5 años con casi 5.000 millones de pesos de inversión.
Por lo anterior, la empresa denunció al municipio de Osorno, en su rol de inspector técnico de la obra, siendo condenado a pagar poco más de 3 mil millones de pesos por no incorporar un estudio de suelo en la licitación previa a la iniciativa.
En tanto, para la actualización del estado de avance que tiene el proyecto, el intendente Harry Jürgensen, se comprometió a entregar detalles de la iniciativa.
