Aún no hay solución definitiva para los habitantes de la Villa Santa Lucía en Chaitén, ya que al recordarse dos años del aluvión ocurrido en el lugar, las familias claman por ayuda concreta.

Fue en diciembre del 2017 cuando parte del glaciar Yelcho se desprendió, alcanzando el río Burritos y cuyo caudal se desplazó hacia las viviendas.

A dos años de la tragedia que dejó 22 personas muertas, los habitantes de la Villa Santa Lucía, recordaron a las víctimas del aluvión y reflexionaron en torno al futuro del poblado.

El intendente de Los Lagos, Harry Jürgensen, reconoció que aún no está la solución definitiva para las familias.

Por su parte, el concejal de Chaitén, Ricardo Rivera, indicó que las familias sienten abandono y que falta de apoyo para el desarrollo económico y productivo.

Pese a que el Ministerio de Vivienda y Urbanismo anunció que la villa seria reubicada en un nuevo terreno de 20 hectáreas, las familias siguen con dudas y se resisten a abandonar el lugar.